La campaña autonómica 2020 de vacunación frente a la gripe comenzará, de forma generalizada en la Comunidad de Castilla y León, el próximo martes, 13 de octubre, si bien las primeras vacunaciones se desarrollarán a lo largo de la presente semana, específicamente en centros sociosanitarios y de atención a la Dependencia para los grupos de riesgo atendidos en esas instituciones, priorizando la población mayor de 75 años, según avanzó hoy la consejera de Sanidad Verónica Casado, durante la rueda de prensa para informar de este programa de Salud Pública.
Ical.- este modo, se adelantan las fechas habituales, que suele ser a finales de octubre, principios de noviembre, siguiendo así, en el actual contexto pandémico por la COVID-19, las recomendaciones al respecto adoptadas por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud.
Este adelantamiento tiene como finalidad reducir el posible impacto gripal en plena pandemia por el nuevo coronavirus SARS-CoV-2, con la coincidencia temporal de ambas enfermedades respiratorias que, en pacientes en riesgo de complicaciones derivadas de la gripe, podrían ver comprometida su evolución clínica.
Casado incidió en la necesidad de vacunarse para prevenir complicaciones y no sumar “ni más riesgo, ni más presión al sistema”, con una actividad “muy elevada” en estos momentos por el COVID-19. También, debido a que muchos de los síntomas de las dos patologías, no se distinguen, y por el gran impacto que ya de por sí tiene la gripe. El año pasado provocó 27,700 hospitalizaciones, 1.800 ingresos en UCI y 3.900 muertes. La vacuna evitó un 26 por ciento de los ingresos, un 40 por ciento en UCI, y rebajó un 37 por ciento la mortalidad.
Los objetivos de este año pasan por alcanzar una ambiciosa tasa de cobertura del 75 por ciento en mayores de 65 años y entre el personal sociosanitario, así como superar el 60 por ciento en mujeres embarazadas, y entre las novedades se incluye una vacuna tetravalente con alta carga antigénica, destinada a residentes institucionalizados, con prioridad para las personas de 75 o más años y con la que se vacunará a este colectivo en centros y residencias socio sanitarias, según explicó la directora general de Salud Pública, quien añadió que a este tipo se suma la vacuna tetravalente, recomendada para personas de hasta 64 años; y la vacuna trivalente adyuvada, dirigida mayoritariamente a la población a partir de los 65 años.
Además, este año también se incluye entre los grupos de riesgo a todos los docentes y trabajadores de centros educativos, además de los profesores de Educación Infantil y guarderías para los que ya estaba indicado; además de la vacunación de mujeres durante el puerperio, que no habían recibido la vacuna en el embarazo y la recomendación a personas con hipertensión arterial aislada. Del mismo modo, se recomienda además de a los mayores de 60 años, a los profesionales sanitarios y sociosanitarios y otros colectivos esenciales para la comunidad, así como a todos aquellos, también niños, que convivan con personas con patologías graves, o a las que puedan contagiar, caso de niños que pasan tiempo con sus abuelos.
Un millón de vacunas
Para esta campaña, La Consejería podrá disponer de hasta 978.750 vacunas, entre las 620.000 adquiridas por el Gobierno autonómico y las 358.750 que podrían llegar a ser distribuidas por el Ministerio de Sanidad, en caso de ser necesarias, para reforzar esta acción preventiva de Salud Pública en el conjunto del Sistema Nacional de Salud.
La Consejería de Sanidad destina 3,12 millones euros para este programa, cantidad que se divide entre los 1,87 millones de euros correspondientes a la vacuna antigripal de inmunogenicidad reforzada y 1,24 millones de euros de las dosis tetravalentes.
Cuidado colectivo
Con el lema ‘Una vacuna más, una gripe menos’, la Consejería de Sanidad quiere reforzar este año el convencimiento social de que la vacunación antigripal no sólo es una vía de protección individual sino que se confirma año tras año como elemento fundamental para el cuidado de la salud colectiva, más aún en la situación pandémica actual con la coexistencia de ambas patologías respiratorias, explicó Pacheco, quien precisó que no está contraindicada para personas que hayan padecido el COVID-19. Lo único que debe administrase cuando hayan finalizado los síntomas y nunca durante el período de cuarentena o confiamiento.
La vacunación frente a la gripe es voluntaria y gratuita para las personas que así lo tienen recomendado por ser mayores de 60 años, por su pertenencia a grupos de riesgo sanitario o social y formar parte de otros grupos de interés para la Comunidad.
Cita previa
Desde Sanidad, se pide acudir a los centros de salud de forma esescalonada y siempre mediante cita previa en el correspondiente centro de salud, consultorio local o punto de vacunación habitual. Esa cita previa estará disponible vía telefónica, llamando al centro de salud correspondiente y también a través de la app ‘Sacyl Conecta’ y en la página web de Salud Castilla y León.
Los profesionales de Atención Primaria tendrán un recordatorio, vía historia clínica, referido al consejo de vacunar a aquellos pacientes que así lo tengan indicado e, incluso, la estrategia de captación prevista indicará la posibilidad de que se realice, especialmente entre la población más mayor y/o vulnerable, una labor de captación proactiva.
Asimismo, para aumentar la captación de pacientes susceptibles de ser vacunados frente a la gripe, la propia receta electrónica incluirá la indicación de vacuna antigripal. En este ámbito de la dispensación farmacéutica, la Consejería de Sanidad cuenta con la colaboración del Consejo General de Colegios de Farmacéuticos de Castilla y León y de sus profesionales, quienes en las oficinas de farmacia prestarán información individualizada sobre la conveniencia de vacunarse.
Fechas
La Junta comenzará a vacunar esta semana a población de especial riesgo institucionalizada en centros de la tercera edad y a partir de la semana que viene se abre el plazo para la vacunación con carácter general.
En el caso de centros de atención a personas mayores y de asistidos serán los profesionales de Atención Primaria, en colaboración con el personal de esas instituciones, los que se encarguen directamente de la vacunación; asimismo, los pacientes hospitalizados podrán recibir durante su estancia en el hospital la vacuna frente a la gripe, en función de su situación clínica
Para la presente campaña y aun habiéndose adelantado las fechas, no se ha previsto fecha límite, manteniéndose el acceso a la vacuna antigripal hasta que las condiciones epidemiológicas así lo determinen.
Grupos recomendados
La vacunación antigripal es primordial para los enfermos crónicos, más aún en el actual contexto sanitario, por cuanto les protege de los posibles agravamientos y complicaciones que, en sus patologías de base pueda causar la gripe, por lo que es fundamental que se inmunicen ante la enfermedad.
Los grupos de riesgo sanitario que tienen recomendada la vacuna antigripal son los mayores de 60 años; las personas adultas y los niños mayores de seis meses que padezcan enfermedades crónicas -pulmonares, cardíacas, renales, hepáticas, oncológicas, neuromusculares graves, diabéticos, hipertensos, inmunodeprimidos, hemofilia y trastornos hemorrágicos crónicos, receptores de hemoderivados y transfusiones múltiples, fístula de líquido cefalorraquídeo, enfermedad celíaca, enfermedad inflamatoria crónica, etc.-; personas con discapacidad y/o déficit cognitivo -síndrome de Down, demencias, etc.-; pacientes crónicos de cualquier edad institucionalizados; niños y adolescentes, de entre seis meses y 18 años, que reciban tratamientos prolongados con ácido acetilsalicílico, por la posibilidad de desarrollar el síndrome de Reye tras la gripe.
También, se dirige a personas con obesidad mórbida -índice de masa corporal superior a 40-; niños entre los seis meses y los dos años de edad, con antecedentes de prematuridad menor de 32 semanas; y gestantes, en cualquier momento del embarazo y mujeres durante el puerperio, si no se han vacunado durante el embarazo.
La vacunación se estima necesaria también para residentes de cualquier edad en instituciones -geriátricos y de asistencia a enfermos crónicos, disminuidos psíquicos, etc.-; trabajadores de centros sanitarios; personas que puedan transmitir la gripe a pacientes de riesgo: trabajadores de centros asistenciales de mayores, trabajadores sociales de similar dedicación -atención a crónicos-; cuidadores y convivientes con personas de riesgo; estudiantes en prácticas en centros sanitarios; servicios esenciales para la Comunidad: bomberos, cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, Protección Civil, etc.); trabajadores de granjas y mataderos de aves y otros relacionados con el medio ambiente; y personal de centros educativos en cualquier nivel de enseñanza.
Asimismo, la Junta desarrollará una campaña de vacunación específica dirigida a los empleados de la Administración autonómica.
Por provincias
En cuanto a la distribución inicial por provincias de las vacunas frente a la gripe a lo largo del mes de octubre, ésta queda de la siguiente forma: Ávila, 46.230 dosis; Burgos, 85.190; León, 114.790; Palencia, 42.780 Salamanca, 89.065; Segovia, 46.040; Soria, 33.100; Valladolid, 126.340; y Zamora, 58.340.
En total, 641.875 vacunas iniciales, a las que se podrán sumar, de forma escalonada y a partir de noviembre, más dosis según sea necesario, hasta esas 978.750 vacunas equivalentes al 40 por ciento de la población castellana y leonesa.
En la anterior campaña, en 2019, 543.580 castellanos y leoneses accedieron a la vacuna frente a la gripe, el 22,65 por ciento de la población. Este dato autonómico, desglosado por grupos de edad, presenta las siguientes cifras: en población de entre 60 y 64 años inclusive, 45.135 personas -el 26,89 por ciento-; entre 65 y 69 años, 61.514 vacunados -el 42,88 por ciento-; entre 70 y 74 años inclusive, 73.438 -el 56 por ciento-y en persona de 75 años y mayores, 236.707 -un 70,88 por ciento-.
En cuanto a residentes en centros de personas mayores, el número de vacunados el año pasado fue de 38.189 o, lo que es lo mismo, el 90,29 por ciento de los institucionalizados; por su parte, 5.431 mujeres embarazadas se vacunaron, situando la cobertura vacunal en este grupo de riesgo en el 51,97 por ciento.
Balance provisional
El balance provisional de la campaña de 2019 sitúa a Castilla y León como la comunidad autónoma española con un mayor porcentaje de personas vacunadas mayores de 65 años, un 61,07 por ciento.
Los profesionales sanitarios de la Gerencia Regional de Salud, en Atención Primaria, que se vacunaron fueron 3.427 -un 40,35 por ciento-, mientras que, por su parte, en el ámbito de la Especializada de Sacyl, el número que se alcanzó fue de 9.660 -el 36,98 por ciento-; por su parte, 202 trabajadores de la Gerencia de Emergencias Sanitarias recibieron la vacuna, lo que supone un 61,13por ciento. En total, 13.289 profesionales inmunizados o, lo que es lo mismo, el 38,04 por ciento de la plantilla pública sanitaria de la Comunidad.
En el ámbito sociosanitario, 5.193 trabajadores de centros de atención a personas mayores se inmunizaron, lo que supone el 28.89 por ciento, y por último, los servicios de prevención de riesgos laborales y mutuas de la Comunidad facilitaron el acceso a la vacunación a 9.431 trabajadores.