El Barcelona sumó su tercera victoria de tres posibles en el arranque liguero, esta vez ante un correoso Athletic Club que le puso serias dificultades para hacerse con el triunfo. Neymar, que salió a falta de media hora para el final, marcó los dos tantos.
La defensa bilbaína y su seriedad frustraron los intentos del Barcelona por perforar la portería contraria. Munir, que fue sacrificado por Luis Enrique para que entrara Neymar, era quien más peligro creaba, aunque sin asustar a los vascos.
Con el brasileño en el campo Messi pudo desplegar todo su talento y encontró el complemento ideal para derribar la resistencia del rival.
Una mala salida desde atrás con el balón de los bilbaínos permitió al Barça adelantarse, y luego, con el Athletic intentando recuperar el gol, Neymar marcó el segundo del día para el equipo y para su cuenta particular y dejó sentenciado el choque. El Bilbao lleva once temporadas seguidas perdiendo en el Camp Nou.
