La Universidad de Salamanca considera “un error focalizar y colocar el objetivo sobre la comunidad universitaria y los estudiantes” ante el aumento de casos de coronavirus COVID-19 en la provincia salmantina, puesto que no dejan de ser “ciudadanos que convivimos en nuestra ciudad las 24 horas del día”.
C.T.M. / Ical.- Respondió así este miércoles el vicerrector de Postgrado y Formación Permanente de la Usal, Nicolás Rodríguez, a las declaraciones realizadas ayer por la consejera de Sanidad, Verónica Casado, que afirmó que el comportamiento de los estudiantes “pone en riesgo la presencialidad” en las aulas del Estudio salmantino durante el presente curso.
“No hay que buscar focos de responsabilidad sino patrones de conducta en relaciones”, defendió Nicolás Rodríguez en nombre del equipo de Gobierno de la Usal, puesto que, en su opinión, “a día de hoy, la respuesta que está habiendo a lo mejor no tiene esa dimensión como la que una afirmación de ese tipo pueda tener”.
Y es que, actualmente, y tal y como señaló la vicerrectora de Docencia e Innovación Educativa de la Universidad de Salamanca, María José Rodríguez Conde, la situación de contagios por COVID-19 en los Grados de la Usal “no es más grave que en otras universidades” de la Comunidad e “incluso en León puede ser peor”.
No obstante, la Universidad de Salamanca contaba hasta la noche de este pasado martes con “72 casos positivos confirmados”, además de “hasta 280 alumnos en cuarentena” pertenecientes a 16 de los 22 centros con los que cuenta el Estudio salmantino. “Los casos están subiendo día a día, pero dentro del contexto universitario no se han producido más” en relación al conjunto de la sociedad.
Por ello, desde el equipo de Gobierno de la Usal defienden que “en un escenario como este, en el que nadie tiene certezas sobre cuáles son los lugares o espacios donde se puede producir el contagio, la experiencia que tenemos en educación no universitaria indica que tampoco es en el escenario universitario donde se pudieran producir los focos”.
Reiteró en ese momento Nicolás Rodríguez que “no podemos olvidar que somos personas las 24 horas del día, que hay un tiempo de nuestra jornada que podemos emplear en espacios de la universidad pero también fuera”. En cualquier caso, el vicerrector de Postgrado también reconoció que existe “la experiencia de otras Comunidades Autónomas y otras universidades donde el cierre de aulas es una de las muchas medidas para tratar de controlar la situación epidemiológica”.
Y es que el propio vicerrector de la Usal reconoció que el escenario es “de incertidumbre y variabilidad total” y que “la diversidad de la situación epidemiológica en todo el país y en la estructura interna de dada Comunidad lleva a que cada uno, en su ámbito de decisión, tome las correspondientes medidas que las autoridades sanitarias pidan”, revelando que la Usal “de puertas para adentro” trabajará “para estar preparada” y, de cara al exterior, será “obediente” y cumplirá “con las indicaciones que puedan venir” de las autoridades sanitarias de la Junta.
Estudiantes y ocio nocturno
Tampoco quisieron centrar la atención desde el equipo de Gobierno de la Universidad de Salamanca en los propios estudiantes, puesto que “en general hay una alta responsabilidad”, si bien “hay casos donde esa responsabilidad desciende”. No obstante, recordaron desde la Usal que no se trata de actitudes dentro del aula sino fuera y que “la vida son 24 horas y ahí no podemos intervenir”.
Por ello, y ante la pregunta de si convendría reforzar la vigilancia en las zonas de ocio, especialmente el nocturno, en la ciudad de Salamanca, la vicerrectora de Docencia e Innovación Educativa señaló que esa circunstancia “excede” su “ámbito de responsabilidad” y que su principal preocupación es “trabajar de manera coordinada dentro de la universidad para establecer las condiciones en las que se pueda paliar el efecto que pueda tener la pandemia dentro del contexto universitario”.
Sistema preparado
Porque, como aseguró la vicerrectora de Docencia e Innovación Educativa de la Usal, María José Rodríguez Conde, la Universidad de Salamanca “está preparada desde el punto de vista de organización, responsabilidad y protocolo de vigilancia epidemiológica para cualquier eventualidad”, como el cierre de aulas, a través de “un sistema modelo por el que nos han felicitado y por el que otras universidades nos están llamando”.
Así, desde el mes de junio “ya se prepararon planes de contingencia para todo el profesorado y para todas las asignaturas” y, en verano, se potenció “todo el campus tecnológico, que se observó que podía ser mejorado sustancialmente”, así como la formación del profesorado. Circunstancia que fue hoy corroborada con la presentación de la Estrategia Institucional de Digitalización de la Usal, que incluye acciones de “divulgación, comunicación y apoyo individualizado a casos especiales” para que, en caso de tener que recurrir a la docencia ‘online’, “no dejar a nadie atrás”.
De hecho, la vicerrectora de Docencia recordó que aunque la modalidad de docencia de la Usal es “siempre de presencialidad segura”, está adaptada a “los espacios que tenemos”, por lo que ya hay “muchos centros y asignaturas que están llevando parte de su docencia en la modalidad ‘online’ con total normalidad”.