Ocho fueron las personas que ignoraron el toque de queda durante la primera noche desde su implantación en Salamanca. La capital del Tormes amaneció, una jornada más, con un halo de incertidumbre e incredulidad por nuevos acontecimientos inesperados en relación con la pandemia del Covid-19. La obligación de recluirse en sus hogares desde las 22.00 horas de este sábado es la última medida alumbrada por la Junta de Castilla y León y auspiciada por el Gobierno, que decretará un nuevo estado de alarma en las próximas horas.
J.M.A. / ICAL. Cerca de la hora límite, una gran mayoría de salmantinos hicieron caso a la nueva normativa y regresaron a sus hogares. La excepción que confirmó esta regla estuvo representada por un total de ocho personas detectadas por alguno de los 25 agentes de la Policía Local que, repartidos en una decena de patrullas, estaban encargados de vigilar el cumplimiento del recién estrenado toque de queda.
No fue la única restricción violada en la ciudad, ya que los agentes levantaron hasta once propuestas de sanción por reuniones ilegales en domicilios. Una constante en las últimas fechas ante las restricciones de horario impuestas a los establecimientos de ocio nocturno hace ya más de una semana.
La Policía Local
Por otro lado, la Policía Local detectó, durante el turno de noche, un total de nueve ciudadanos que no portaban de forma oportuna la mascarilla obligatoria en todo el territorio nacional.
De igual modo, tal y como confirmó el Ayuntamiento de Salamanca a la Agencia Ical este domingo, en las horas previas al toque de queda, es decir, antes de las 22.00 horas del sábado, los agentes interpusieron una veintena de denuncias por no respetar la distancia interpersonal de seguridad en una terraza de la capital. Finalmente, la Policía Local levantó acta de sanción a un establecimiento que había excedido el número de mesas en su terraza.
