Los tres integrantes de una banda criminal detenidos el pasado lunes por agentes de la Guardia Civil de Salamanca por el robo en el interior de varias viviendas ubicadas en municipios del alfoz de Salamanca, establecieron su base de operaciones para la comisión de los delitos en una casa rural situada en la localidad salmantina de Zarapicos.
Así lo dio a conocer este jueves la Guardia Civil de Salamanca, que llevó a cabo las detenciones dentro de la operación denominada ‘Albarroq’, que se inició con motivo de la comisión de varios robos en viviendas ubicadas en urbanizaciones situadas en localidades del alfoz de Salamanca.
La investigación, desarrollada durante un año, llevó a los agentes de la Unidad Orgánica de la Policía Judicial de la Benemérita a determinar que los presuntos autores de los hechos eran ciudadanos de nacionalidad albanesa establecidos en las provincias de Madrid y Toledo, desde donde se desplazaban a la provincia de Salamanca, y a otras del territorio nacional, con el único fin de acceder a diferentes domicilios para sustraer dinero y joyas.
Así, durante el pasado fin de semana, los agentes responsables de la investigación detectaron cómo los componentes del grupo delictivo se habían desplazado desde su lugar de residencia a la provincia de Salamanca, estableciendo su base de operaciones en una casa rural alquilada en la localidad de Zarapicos, por lo que se inició un servicio de vigilancia sobre ellos.
Gracias al mismo, los tres hombres, E.N. de 43 años de edad, E.L. de 37 años, y H.C. de 27 años, fueron detenidos en la mañana del 26 de octubre, en el polígono de los Villares y en Doñinos de Salamanca, cuando se encontraban realizando labores de obtención de información previas a la comisión de nuevos actos delictivos en diversas urbanizaciones y localidades de la provincia de Salamanca.
No obstante, durante el operativo realizado en Doñinos de Salamanca, uno de los detenidos intentó darse a la fuga con su vehículo, haciendo caso omiso a las señales de los agentes y atropellando a dos de ellos, a los que causó varias lesiones. Sin embargo, el resto de agentes lograron interceptar el vehículo para proceder a la detención del individuo.
Una vez practicadas las detenciones, se procedió a la entrada y registro en dos viviendas, una en la provincia de Salamanca, en la casa rural alquilada por los detenidos, y otra en la localidad de Borox (Toledo), donde tenían su residencia habitual, localizándose gran cantidad de joyas y efectos procedentes de los últimos robos cometidos.
Y es que la banda criminal desarticulada cometió, durante el tiempo de la investigación, un total de 17 robos con fuerza en domicilios ubicados en las provincias de Salamanca, Zamora, Madrid y Córdoba.
