“Estamos indignados”. Así se muestran los empresarios del comercio turístico del casco antiguo. El motivo: el Ayuntamiento ha cortado las calles cercanas a la Catedral y a la Plaza de Anaya por la subida de El Mariquelo a la Torre de la Catedral para que no haya aglomeraciones, “pero no nos han avisado a nosotros, nos hemos enterado por los policías y otros por la prensa”, explican desde la asociación.
Les indigna el corte de las calles “porque si había algún turista que ha venido de León, Burgos o Palencia se ha encontrado con las calles cortadas y nosotros sin la posibilidad de vender nada. Las cajas que estamos haciendo desde hace unas semanas son de 30, 40 o 60€ al día. Así no podemos seguir y además nos cortan la calle un sábado por la mañana. No entendemos nada”, aseguran.
Están a favor de la subida de El Mariquelo, lo que no entienden es que corten las calles. “Nos sentimos desprotegidos, los comercios de los cascos históricos no contamos para nada, ni para nadie. Nosotros vendemos recuerdos de las ciudades, deberíamos considerarnos como parte del turismo, pero tampoco. Estamos desesperados, hay algunos comercios que han cerrado y otros se lo plantean”, explican.
Además, las personas no se han agolpado en la Plaza de Anaya, porque están cortadas las calles, lo han hecho en las inmediaciones del cruce de la calle Palominos con la Rúa.