El Ministerio y la Consejería de Sanidad realizarán en las próximas semanas un nuevo estudio de seroprevalencia para actualizar los datos del primero, que determinó una tasa del 6,9 por ciento, es decir, que 165.000 ciudadanos castellanos y leoneses habían padecido el COVID-19. “Es importante actualizarlo porque esta segunda ola se comporta de forma diferente a la primera”, comentó la consejera.
Ical.- Así, señaló que este estudio “ayudará a comprender cuántas personas han pasado la enfermedad”. El 16 de noviembre comenzará el trabajo de campo, que se desarrollará hasta el día 27. A partir del 9 de noviembre tendrá lugar la fase de captación para la fase en Castilla y León. Por ello, Casado realizó un llamamiento a la ciudadanía para que colabore si es citada.
Por otra parte, la consejera de Sanidad indicó que su departamento recogerá tomas de análisis de aguas residuales y fecales en residencias de ancianos con el objetivo de anticiparse a la presencia del COVID-19 en estos centros. “Si observamos una ligera incidencia del coronavirus en un colector, podremos actuar más rápidamente para que no afecte al resto de la instalación”, justificó.
Así, el objetivo es recoger alrededor de un centenar de muestras diarias para cubrir toda las posibilidades de estos centros y poder afrontar “la vulnerabilidad de los mayores”. En la primera ola de la pandemia se trasladaron más de 5.000 residentes a centros hospitalarios de la Comunidad.
Igualmente, Casado animó también a descargarse la app Radar Covid, de la que actualmente se contabilizan cinco millones de descargas en Europa (con una estrategia compatible en todos los países de la UE). La consejera comentó que si se alcanzan los ocho millones de descargas, el control “podrá ser exponencial” y habrá más facilidad para el rastreo. También invitó a utilizar la app Sacyl Conecta para pedir cita de forma ágil.