La pandemia está desplazando el bullying de las aulas y los patios del colegio a los ordenadores y móviles del alumnado. La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) constata esta creciente preocupación sobre el ciberacoso, más acusado con el modelo semipresencial de enseñanza entre parte del alumnado
Así, el Servicio CSIF Ayuda Profes, que ofrece asesoramiento y estrategias para ayudar a niños/as, docentes y familias contra el acoso escolar y ante situaciones de violencia, ha recibido desde el inicio de este curso casi un centenar de consultas sobre cómo proceder ante este tipo de casos, ante la falta de unas directrices precisas.
En línea con las propuestas de CSIF, el Ministerio de Educación se ha comprometido en el Observatorio de la Convivencia Escolar- reunido este jueves por primera vez en nueve años- a estudiar los cambios que se están produciendo dentro de las aulas tras un proceso de recogida de información y análisis, a impulsar planes de ayuda a las víctimas y a estudiar los protocolos de las diferentes administraciones.
«Reclamamos, además, que se revisen los protocolos actuales de acoso en todas sus variedades para adaptarlos a esta situación de pandemia. Y es que, según un estudio de CSIF, el 90 por ciento del personal docente identifica y convive con situaciones de violencia en los centros de educación primaria y secundaria de España», explican desde CSIF.
Cambios en los patrones de violencia
Ahora, en plena pandemia, las clases semipresenciales y los nuevos modelos de organización en los centros escolares están provocando también un cambio en las pautas de acoso y ciberacoso a través de Internet y de las redes sociales.
A las peleas, vejaciones entre compañeros y compañeras, amenazas al profesorado por parte del alumnado y familias, las situaciones habituales hasta ahora, se añaden ahora otras formas de acoso fuera de las aulas, a través de Internet y de las redes sociales, y por tanto más difíciles de atajar.
Esta misma semana, además, «hemos puesto en conocimiento de la Administración la quema de dos turismos de dos docentes interinos en un instituto en Méntrida (Toledo). Este nuevo episodio de acoso ha provocado que uno de los profesores afectados haya recibido una baja laboral de índole psicológica».
Desde CSIF, con motivo hoy del Día Internacional contra la Violencia y el Acoso Escolar, incluido el Ciberacoso promovido por la UNESCO, «advertimos de que esta lacra afecta a docentes y al alumnado a nivel mundial y provoca terribles secuelas psicológicas».
Y es que, según datos de la UNESCO, uno de cada tres estudiantes es maltratado por sus compañeros y, a posteriori, arrastra graves secuelas emocionales que, en ocasiones, pueden llevarlo, incluso, a desarrollar ideas suicidas.
CSIF, a través de las distintas campañas realizadas hasta ahora, defiende la importancia del apoyo, unión y cooperación en grupo en defensa del acosado. Considera necesario aunar esfuerzos de todas las partes involucradas, incluyendo Gobierno, profesionales en el área educativa, sociedad de padres y a la comunidad en general. «Exigimos, además, a las Administraciones educativas que afronten acciones inmediatas para aportar soluciones profesionales y eficaces», concluyen.