La temporada 2020-21 no será recordada con buen sabor de boca por jugadores y entrenadores; extraña, rara, anormal…
Estos son solo algunos de los calificativos que pueden definir una campaña con muchas novedades, quizá demasiadas. Una de ellas es el formato de competición, tan corto como injusto, ya que en muy poco tiempo, cada club se jugará su futuro en el medio plazo.
Y, otro de los inconvenientes que conlleva esta nueva campaña es el parón que van a tener que vivir la gran mayoría de los 102 clubes que compiten en Segunda B, en el fin de semana del 14-15 de noviembre.
No en vano, serán solo los grupos con equipos impares los que compitan, mientras que el resto tendrá que recuperar partidos aplazados, o bien realizar una ‘minipretemporada’; Guijuelo, Unionistas y Salamanca CF UDS están entre ellos.
En el caso del Guijuelo, estos son los planes que tiene para vivir una semana sin competición, tal y como ha explicado el entrenador gallego del Guijuelo, Jacobo Montes:
Plan: “Después del partido contra el Compostela (7 de noviembre), descansaremos domingo y lunes y el martes analizaremos todo lo que hicimos mal en el partido, además de visionar de nuevo el choque. Luego ya, a partir del miércoles, a preparar el partido contra el Deportivo del día 22. Tenemos que evolucionar y dar más pasos en los planos ofensivo y defensivo”.
Partido amistoso: “Sí, el objetivo es competir el fin de semana para no perder esa rutina y que los jugadores con menos minutos puedan ir cogiendo más ritmo y seguir evolucionando. El rival aún no lo hemos cerrado, pero no será ninguno de los salmantinos al competir en el mismo grupo y no mostrar mucho nuestras cartas. Un equipo como el Mérida estaría bien por nivel y cercanía, veremos qué podemos hacer”.
Parón en la Liga: “Cualquier interrupción del campeonato no es buena porque te rompe un poco el ritmo de la competición, la rutina. Es cierto que hay más días para preparar un partido, pero el rival (Deportivo) también los tiene. Los jugadores ahora lo que necesitan es competición para poder evolucionar y mejorar, ellos sí notan la diferencia. El cuerpo técnico no, porque para nosotros es incluso una mayor ventaja”.
Sesiones de entrenamiento: “Somos aún un equipo en construcción y por eso necesitamos trabajar en las sesiones de entrenamiento, especialmente las transiciones, hay que automatizar todo. Nos viene bien para eso, pero mal por rompernos la rutina de competición”.
Mejorar más adelante que atrás: “Creo que siempre es más difícil el aspecto ofensivo que el defensivo, y explico por qué. En el plano defensivo, es más ‘sencillo’ que el jugador asimile los conceptos, entendiendo también la dificultad que conlleva, mientras que en el ofensivo, hay que automatizar muchos más movimientos, porque de uno que haga un jugador depende el siguiente y hay mucha interacción entre los compañeros. Considero que nos hace falta generar más arriba para poder crecer”.
El 22 de noviembre llega el Deportivo al Municipal: “Por el mero hecho de ser el rival que es al que nos tenemos que enfrentar, al jugador no le va a afectar el parón porque se trata de un partido que todo el mundo quiere jugar y para el que no hace falta motivación. Intentaremos que el Deportivo sufra aquí en nuestro campo, porque aunque entrenará en hierba artificial, no será lo mismo que nosotros. Eso sí, con la calidad que tienen sus jugadores y su nivel, va a ser muy, muy complicado”.