El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, recibió este miércoles el Premio al Liderazgo Directivo, de la Asociación Española para la Calidad (AEC), en reconocimiento a su compromiso personal y profesional y a una trayectoria que sirve de inspiración a nuevas generaciones. En este evento aseguró que «hoy la calidad es desarrollo sostenible».
Según informó la compañía en un comunicado, el galardón fue entregado en un acto organizado por la asociación con motivo del Día Mundial de la Calidad, en el que se abordó la capacidad de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) para servir de impulso y generar nuevas oportunidades de negocio, aumentar el valor de marca y retener el talento.
En su intervención, el presidente de Iberdrola apuntó las claves del camino recorrido por la compañía, basadas en “valores sólidos -como el esfuerzo, la lealtad, la honradez y el trabajo en equipo-; una visión innovadora para anticiparse a los retos a largo plazo; una gestión dinámica para adaptarse a los cambios y una ejecución que favorezca el crecimiento, el desarrollo sostenible y la creación de valor para los empleados, los accionistas y la sociedad”.
Galán recordó que “en 2001 vimos claro que la lucha contra el cambio climático era uno de los grandes retos a los que iba a tener que enfrentarse la humanidad. Que el avance hacia una economía descarbonizada era el único camino posible y que el sector eléctrico podía aportar soluciones eficientes”. “Nos anticipamos a los demás -dijo- apostando de manera pionera por las renovables y demostramos que son una alternativa viable y eficiente para producir energía”.
La trayectoria de Iberdrola que la colocó en posiciones de liderazgo mundial “ha estado siempre sustentada en un modelo de empresa en el que conjugamos la creación de valor sostenible para los accionistas, los empleados y la sociedad. Acciones todas ellas -ha explicado-, alineadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible definidos por Naciones Unidas, que hemos integrado a nuestra estrategia”.
Atreverse y arriesgar
“El papel de quien quiere cambiar las cosas conlleva tomar decisiones -no siempre sencillas-, atreverse y arriesgar”, expresó el presidente de Iberdrola, quien comentó que, en estos momentos, la mejor manera de impulsar la recuperación económica es avanzar en la transición hacia un modelo energético sostenible, por el elevado nivel de inversiones que supone y la capacidad tractora de su actividad.
“Porque, al igual que el lema de esta jornada, nosotros también consideramos que sostenibilidad es calidad y en nuestro proceso de mejora continua llevamos nuestro compromiso con el desarrollo sostenible como bandera. Una responsabilidad que, ahora más que nunca, asumimos ya que el modelo de negocio que llevamos más de 20 años desarrollando nos sitúa como un agente tractor clave en la transformación del tejido industrial”, explicó.
En sus palabras, Galán aseguró “estar preparados para impulsar con nuestra experiencia, compromiso social y capacidad financiera, un modelo de crecimiento económico sostenible a largo plazo para hacer frente a los retos actuales de la sociedad”.
La semana pasada, Iberdrola presentó el plan de inversión más ambicioso de su historia centenaria y, también, el mayor realizado nunca por una empresa española. Unas actuaciones, que representan una inversión de 75.000 millones de euros hasta 2025, con los que la compañía duplicará su capacidad renovable hasta los 60.000 MW. El plan incrementará los activos de redes eléctricas de la compañía un 50 por ciento en el mismo período, hasta los 47.000 millones de euros, duplicándolos para 2030.
“Porque de las crisis se sale trabajando más e invirtiendo más y mejor”, defendió. La compañía prevé que su actividad, sus compras y sus inversiones impulsarán el negocio de sus 22.000 proveedores -sustentando 500.000 puestos de trabajo en todo el mundo-, así como nuevas contrataciones en el grupo, que podrían alcanzar las 20.000 a 2025.