La Policía Nacional de Salamanca ha detenido a tres personas relacionadas con el tráfico de drogas. Dos de ellas, una pareja que fue detenida en su domicilio, ubicado en las inmediaciones de la plaza de Burgos, por vender sustancias estupefacientes, y la tercera es un hombre que fue arrestado previamente en el centro de la ciudad tras, presuntamente, haber comprado droga en la vivienda.
Tras las investigaciones pertinentes, y habiendo solicitado una orden de entrada a través del Juzgado de Instrucción de Guardia, los agentes registraron el domicilio de la pareja ahora detenida y hallaron, en un mueble ubicado en el pasillo, dos placas de hachís de 193 gramos cada una, y en el salón, tres placas más de esta sustancia, dos de 61 gramos y otra de 96. Además, la Policía Nacional se incautó de 860 euros en efectivo, una báscula de precisión, un ‘grinder’ de color verde con restos de supuesta droga, un rollo de film transparente y tres paquetes de bolsas con autocierre de diferentes tamaños.
A esos efectos, hay que añadir un bote de cristal con 22 gramos en cogollos de marihuana y una bolsa de plástico con 190 euros que fueron arrojados por la ventana a la llegada de los agentes. Así pudo advertirlo uno de los policías que observó cómo la mujer se encargaba de tirarlo por una de las ventanas de la vivienda. En total, fueron intervenidos 350 gramos de hachís y 22 de marihuana.
Fuentes policiales revelaron a Ical que a los detenidos les constan varios arrestos anteriores, algunos de ellos por hechos similares a los que ahora han acabado con ellos en la Comisaría Provincial de Salamanca.
La Policía Nacional informó también este martes de otra actuación que resultó definitiva para desmantelar el ‘narcopiso’ de los alrededores de la plaza de Burgos.
En los días previos, los agentes detuvieron en el centro de la ciudad a un varón al que le fue intervenida una placa de 96 gramos de hachís, que presuntamente había sido comprada en el domicilio objeto del posterior registro, que dio como resultado la detención de la pareja.