Mientras luchamos por contener la segunda ola de la pandemia ya nos estamos haciendo al a idea de que la tercera nos espera inexorablemente a la vuelta e la esquina por celebrar la Navidad. En medio de este desastre sigue la búsqueda del origen de la infección. China trata de lavar su imagen diciendo que el coronavirus no nació en el gigante asiático, mientras el científico formado en la Usal y actualmente epidemiólogo y director del Instituto de Salud Global y Patógenos Emergentes en la Escuela de Medicina Icahn Mount Sinai de Nueva York, Adolfo García Sastre, ha dicho en una entrevista a la Televisión de la Universidad de Burgos, que quizá nunca se sepa con toda seguridad el origen, aunque todo apunta a que fue en Wuhan.
China, que presume ser territorio libre de Covid mientras la pandemia se propaga por el resto del mundo sin cesar, está volcada en hacer ver que el coronavirus no tuvo su origen en Wuhan, sino que fue importado.
Según la versión que ha hecho circular, “la creciente evidencia” mostraría que los mariscos o la carne congelada procedentes de otros países pudieron haber introducido el virus en China. Esos productos llegaron a mercados de Wuhan y de Pekín donde se contagiaron más los vendedores de marisco congelados que los de mariscos vivos.
China dice haber detectado trazas de coronavirus en varios empaquetados de productos refrigerados entre ellos, de carne brasileña y de camarón ecuatoriano.
Por su parte, el epidemiólogo y director del Instituto de Salud Global y Patógenos Emergentes en la Escuela de Medicina Icahn Mount Sinai de Nueva York, Adolfo García Sastre, afirma en una entrevista concedida a la Televisión de la Universidad de Burgos, que quizá no se acabe sabiendo “con total seguridad” el origen del coronavirus.
Explica que el SARS-Cov2, el coronavirus que ocasiona la enfermedad Covid-19, pertenece a una familia de virus relacionados, hay muchos tipos de cepas en murciélagos, sobre todo. “En algún momento, este virus que se encontraba en un murciélago fue capaz de infectar a una persona, quizá directamente, quizá mediante un animal intermediario, eso no está claro», ha dicho.
Lo que sí se ha comprobado es que esta infección «ocurrió en algún sitio cercano a Wuhan, seguramente, en China. Quizá la primera transmisión ocurrió en Wuhan, quizá la primera transmisión ocurrió en un pueblo cercano y luego una persona infectada lo llevó a Wuhan. Empezó a transmitirse de persona a persona en Wuhan, sobre todo relacionado con casos en un mercado. Ahí fueron los primeros casos, donde el virus del murciélago saltó a las personas, o puede ser simplemente que fue un sitio donde se amplificó, llegó una persona que estaba infectada y empezó a infectar a empleados del mercado, de tal forma que luego las gentes que venían al mercado se empezaron a contagiar los unos a los otros, eso es lo que desconocemos», comentó.