Muchos, por no decir todos, hemos gastado parte de nuestra paga en pesetas o euros para poder usar el ‘primer móvil’…
Sí, ése que nos obligaba a salir de casa para llamar a un amigo, primo o nuestro primer amor sin que nadie se enterase de nuestra conversación, a veces rápida por falta de recursos, otras más extensa si la cifra de monedas daba para ello.
También nos han servido para hablar desde la ciudad con nuestros amigos del pueblo o viceversa, para hacer una llamada de urgencia en plena calle por estar lejos de casa o, simplemente, para pedir un taxi o llamar a nuestros padres para que acudiesen a nuestro ‘rescate’ tras una noche de fiesta.
Mil y una aventuras como ésta van a decir adiós de una manera definitiva, si no lo habían hecho ya; hablamos sí, de las cabinas de teléfono que estaba situadas en numerosos puntos de la ciudad y en algunos pueblos para permitir comunicarnos, algo que ahora vemos como muy, muy lejano.
Según fuentes de Movistar consultadas por La Crónica de Salamanca, este 1 de enero se puso punto y final a la vida de las cabinas de teléfono, aunque su eliminación total se hará de manera gradual a lo largo del segundo semestre de 2021.
En la actualidad, todavía sobreviven cerca de un centenar de teléfonos públicos a lo largo de toda la provincia de Salamanca. La desaparición de las cabinas se producirá a nivel nacional de acuerdo con la Disposición Transitoria Novena del Anteproyecto de Ley General de Telecomunicaciones cuando entre en vigor.
Por tanto, pronto, muy pronto diremos adiós a nuestro primer ‘móvil’, ése que nos salvó en mil y una ocasiones… recuerdos para siempre.