El ministro de Sanidad Salvador Illa se mostró abierto a acordar con las comunidades autónomas la reforma del decreto del estado de alarma para permitir que los ejecutivos autonómicos, como ya ha hecho Castilla y León, puedan adelantar el toque de queda, en este caso a las 20 horas.
Illa dijo que el estado de alarma se prorrogó hasta el 9 de mayo precisamente para acordar medidas comunes con las autonomías, dotarse de indicadores comunes y de un marco legal “común y previsible que ha funcionado a través de la cogobernanza y el estado de alarma”.
No obstante, precisó que el Gobierno “siempre está a favor de cualquier medida que sea eficaz para doblegarla curva de contagios con la cobertura legal necesaria” porque se está hablando de decisiones, como el adelanto (ampliación) de la franja del toque de queda que limitan derechos fundamentales, como la movilidad de los ciudadanos, “y si hay que articular nuevas medidas se hará con las garantías legales en el seno del comité interterritorial de Sanidad”, en el que se reúnen el ministerio y las comunidades autónomas.
Lo que sí descartó el ministro, de momento, es un nuevo confinamiento estricto como también ha pedido Castilla y León.
Sobre la campaña de vacunación, Illa destacó que «el ritmo ers óptimo» y España es el noveno del mundo y delos primeros de la UE en porcentaje de vacunas administradas (el 70% de las que hemos recibido). Además, dijo que el objetivo es que en unos meses haya más ciudadanos vacunados que contagiados y que el 70% de los españoles se haya vacunado «de aquí al verano».
Recordó que la próxima semana llegarán a España 205.000 vacunas de Pfizer (estaba previsto recibir 360.000) debido al recorte de la fabricación anunciado por la farmacéutica para prepara sus instalaciones de Bélgica para aumentar la producción de las vacunas. En la semana del 25 de enero ya llegará lo comprometido porque el abastecimiento habrá recobrado la normalidad. Ya en el segundo trimestre del año aumentará el cupo de vacunas que recibirá España y puede aumentar el ritmo de vacunación.
Illa dijo que el reparto de las 205.000 vacunas de la próxima semana «será equitativo» entre las comunidades autónomas y la prioridad será garantizar la segunda dosis a los ciudadanos que se pusieron las primeras dosis hace dos semanas.