La variante británica del coronavirus, que en España será la mayoritaria a finales de febrero y que se transmite con mayor rapidez que la original de Wuhan, no escapará a la protección que genera la vacuna de Pfizer/BionTech a los ciudadanos que la han recibido.
El propio laboratorio ha realizado un estudio con suero de 40 personas que se vacunaron con las dos dosis con un intervalo de 21 días entre la primera y la segunda dosis. Lo han expuesto a un pseudovirus con la variante B.1.1.7 de la cepa británica.
Según el artículo publicado en la revista Science, del análisis concluyen que los sueros presentaban títulos de neutralización ligeramente reducidos, pero ampliamente conservados contra el pseudovirus B.1.1.7., aunque advierten de que el trabajo se ha realizado con un pseudovirus no replicante.
Por eso creen que es “poco probable” que la variante británica del coronavirus supere el escudo de la vacuna de Pfizer.
En septiembre de 2020, se descubrió la variante B.1.1.7 del SARS-CoV-2 en el Reino Unido, y posteriormente aumentó su prevalencia, mostró una mayor transmisibilidad y se extendió a otros continentes, recuerda la revista en un resumen del trabajo.
Esta variante presenta una serie de mutaciones en la proteína de la espícula (S), que el virus utiliza para entrar en las células del huésped.