[dropcap]K[/dropcap]iko Rivera ha aprovechado sus redes sociales para enviar un comunicado oficial en el que expresa que no puede más. «Al final es televisión y hacen su espectáculo, pero por mi salud mental, tengo que alejarme. No puedo más», comparte con sus seguidores.
Estas declaraciones las hace unas horas después de haberse sentado en el plató de Sálvame Deluxe este domingo. «He estado despierto hasta las cinco de la madrugada», explica y eso le perjudica para crear, para centrarse en la música y para estar con su familia, su mujer Irene y sus hijos, Francisco, Ana y Carlota. Esta situación me afecta en mi día a día, tengo mal humor. No tengo ganas de nada».
De una manera serena, pero con una profunda tristeza, Kiko Rivera cuenta que la desilusión con su familia «ha sido tremenda, con mi madre, mi tío…».
Hace un propósito de intenciones al decir que se aparta un poco de todo el espectáculo de la televisión, para centrarse en él. «No tengo ganas de volver a sentarme en un plató, salí destrozado», reconoce.
Va a dejar todo el asunto de la herencia de su padre en manos de sus abogados y de los jueces y da las gracias a todos los seguidores y amigos que lo han animado y acompañado en estos meses tan duros.
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