Numerosos salmantinos eligieron este domingo el Pozo de los Humos, en Masueco, para pasar una agradable jornada primaveral en pleno mes de febrero.
El problema es que fueron muchos los que tuvieron la misma idea, igual que el sábado, y el paraje se llenó, tanto en la vertiente de Masueco, donde está el mirador, como en el aparcamiento del lado de Pereña, desde conde se contempla una panorámica desde el otro lado del río, y que ofrecía una imagen de centro de ciudad en hora punta en plenas Arribes del Duero o un pueblo en ferias, alterando la tranquilidad y apacibilidad del entorno.
Lo que no cambia es la cascada de 50 metros que se encuentra en plenitud debido a las lluvias de las jornadas precedentes, dejando imágenes espectaculares.