Primer día tras la anulación del adelanto del toque de queda a las 20 horas con las terrazas llenas hasta el punto de que los camareros han tenido que apremiar a muchos de ellos porque no tenían prisa por levantarse.
Ellos disponían ya de dos horas más antes de confinarse, pero para los hosteleros no ha cambiado nada respecto a la situación anterior y deben cerrar a las 20 horas.
O un poquito más tarde, porque a las 20 hs empiezan a levantar a los que siguen sentados en torno a la mesa y hay que recoger a toda prisa.
En otros sitios los vasos estaban por la mitad a las 20 horas, arañando algunos minutos al reloj y a la prohibición de estar abiertos a partir de las 20 horas.