Salamanca salió este miércoles del nivel 4 de riesgo extremo al registrar una incidencia acumulada a 14 días de 244 casos por cada 100.000 habitantes, ligeramente por debajo de los 250 que marcan la entrada en el nivel de máxima alerta epidemiológica.
No ocurría esto desde mediados de noviembre y de consolidarse la tendencia podría permitir levantar algunas restricciones al pasar al nivel 3. Antes debería estar toda la comunidad por debajo de esos 250 casos pro 100.000, pero aún quedan tres provincias en riesgo extremo (Soria, León y Palencia).
Además, y siempre según explica la consejera de Sanidad, Verónica Casado, en cada intervención pública, hay que tener en cuenta los indicadores sanitarios, especialmente el de la ocupación de la UCI, porque debería tener una ocupación por debajo del 25% con pacientes covid y de momento en Salamanca estos enfermos ocupan el 32% de las camas UCI.
Las camas de hospitalización en planta ocupadas por pacientes covid también cuenta, pero este indicador está a punto de cumplirse, porque el límite es el 15 por ciento y este miércoles en Salamanca se sitúa en el 16%.
La presión hospitalaria está como a mediados de enero, mientras que los indicadores epidemiológicos de incidencia están como a primeros de noviembre, cuando empezaba a remontar la segunda ola.
La incidencia acumulada baja en el conjunto de la provincia, pero repunta ligeramente en la ciudad del Tormes.
