Es una de las jugadoras cuyo cuerpo ‘petó’ en esta temporada de la Covid-19, la más dura a la que ha tenido que hacer frente Perfumerías Avenida.
El físico ha dicho basta a muchas jugadoras por la exigencia física y los viajes; pero justo antes de hacer historia en la Euroliga, les ha llegado un descanso merecido para poder poner al equipo a punto.
Andrea Vilaró luchó por ser profesional de este deporte llamado baloncesto hasta que lo consiguió después de formarse en muchos clubes, incluso en EEUU, hasta aterrizar en Avenida, donde le gustaría continuar. Asegura que el éxito del equipo este año ha sido ir entrenamiento a entrenamiento y el buen grupo que han hecho dentro y fuera de la pista.
Por último, asegura que irán a competir con «uñas y dientes» en la F4, uno de sus sueños; el otro se llama Juegos y termina en Olímpicos. Llegará…
Baloncesto… ¿por qué?
La verdad es que en mi colegio había mucha tradición con este deporte y yo era muy alta para mi edad; me madre me dijo que probara, me gustó y me picó el gusanillo de seguir. Quise continuar jugando y desde pequeña todo me salió bastante bien y me ficharon para el Barcelona, una gran motivación para mí.
Empecé en el IPSI de Barcelona y de ahí ya pasé al Barça, luego al Siglo XXI, un año en EEUU y luego de ‘parranda’ por España.
¿En qué momento te diste cuenta de que podías dedicarte al baloncesto de manera profesional?
Bueno, una vez que entré en el Siglo XXI fue cuando realmente me di cuenta de que podía dedicarme en serio a este deporte; es una escuela de mucho nivel y a mí me apasiona entrenar y jugar y ahí comenzó todo. Desde muy pequeña lo tuve claro y he tenido la suerte de no haberme equivocado con esto.
¿Tienes algún referente? ¿Por qué?
Cuando era pequeña, me encantaba la revista de la NBA y me fijaba mucho en Allen Iverson; pero cuando entré en el Barcelona y veía a todas las jugadoras senior que había, me fijaba y me gustaba mucho Ingrid Pons… eso y que me pasaba horas y horas viendo esa revista que te decía de la NBA.
¿Qué tiene Perfumerías Avenida que no tenga otro club?
Avenida es un equipo donde sabes que vas a luchar por todo siempre, o al menos vas a estar intentándolo; es otro nivel de profesionalidad y me apetecía mucho jugar aquí.
Acabas contrato, ¿quieres seguir vinculada a este club?
Sí, es cierto que termina contrato esta temporada, pero me gustaría seguir, claro.
La primera derrota de la temporada os privó de un título; ¿fue muy doloroso?
Sí, claro, fue muy doloroso, pero no sé si injusto. Girona hizo las cosas muy bien; teníamos la gran ilusión de hacerlo bien en la Copa y aprovechar la buena dinámica, pero al final fue un partido que nos enseñó muchas cosas, entre ellas aprender a valorar más lo que es una victoria. Siempre intentamos aprender de todo.
Dijo Roberto Íñiguez hace poco en una rueda de prensa, que se os lesionan hasta los aros; y no le falta razón…
Sí, creo que han sido muchas cosas; el coronavirus, los calendarios, la temporada, muchos partidos, los viajes… todo hace que las jugadoras petemos en algún momento y desde hace unas semanas hemos tenido todos los problemas posibles. A ver si poco a poco recuperamos efectivos.
Una de las lesionadas eres tú; ¿cómo estás?
Bien, mejor y más contenta. Poco a poco a ver si entro en el equipo porque he tenido un tratamiento más conservador para llegar a la F4 y soy optimista.
El equipo ha contado con dos semanas casi de parón hasta la F4; ¿bueno o malo después de un año intenso?
Por una parte es muy positivo porque nos ha dado tiempo a descansar y a recuperar poco a poco a jugadoras; pero también creo que algún partido no nos hubiese venido mal por el tema del ritmo de competición. Pero es lo que hay y tenemos que llegar lo mejor posible a la F4.
¿Por qué ha funcionado tan bien el equipo en la temporada más difícil?
Desde el primer momento, Roberto nos dejó claro que no debíamos pensar más allá de cada entrenamiento, del día a día; hemos seguido esa filosofía y ha sido uno de los secretos para afrontar los retos y los partidos de la mejor manera posible.
¿Podemos ver una mejor versión de Andrea Vilaró?
Sí, claro; creo que puedo dar mucho más, pero hay un cambio de la temporada pasada a ésta y aún puedo ofrecer muchas cosas más al equipo.
Diez años después, Avenida regresa a una F4, ¿qué tiene de especial esta Euroliga?
Es una Euroliga nueva para todos; las ‘burbujas’ son lo que son y quizá le han dado un poco más de emoción a este año y posibilidades a los equipos que seguro que hubiesen sufrido más en una fase de grupos, incluso para nosotras. Vamos a disfrutar y a la vez a luchar con uñas y dientes.
La Euroliga, ¿ha pasado de ser un reto a un objetivo?
Fue algo en lo que poco a poco fuimos creyendo que era posible; es verdad que Roberto fue muy ambicioso desde el principio y quería un equipo para estar arriba. Pero nos ha sorprendido un poco a todos, la verdad.
¿Cambiaría ganar esta Liga por ganar la Euroliga?
Vamos a intentar ganar las dos cosas; pero es cierto que muy pocas jugadoras pueden tener la opción de jugar una F4 y es una oportunidad única para todas nosotras.
Dentro del vestuario, habláis maravillas de Marica Gajic; ¿por qué?
Hemos visto a una persona que lo ha pasado muy mal, pero que pese a todo ha estado siempre al servicio del equipo cuando la hemos necesitado. Sabe siempre cómo sacarte una sonrisa y eso es de valorar a pesar de haber estado mucho tiempo lesionada. Siempre ha intentado estar conectada.
¿Haces piña con tus compañeras fuera de la pista?
Sí, la verdad es que intentamos pasar mucho tiempo juntas y quedamos muchas veces para tomar café o pasar muchos ratos; creo que es muy importante.
No tenéis mucho tiempo para el ocio, y menos en este año. ¿Qué haces cuándo no juegas o entrenas?
Me gusta mucho ver series, salir a pasear o estar tranquila; también veo mucho deporte, sea cual sea; baloncesto, fútbol, tenis… en esta época de Covid es una manera de pasar el rato.