La vicepresidenta primera del Gobierno, ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Carmen Calvo, explicó este jueves al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, que los fondos Nueva Generación de la UE “no son recursos internos, esto no es cuánto dinero me corresponde” sino los problemas que tiene el territorio y los proyectos que presenta para abordarlos.
Ical.- Calvo, que cursó una visita a Valladolid, destacó que lo importante son “los proyectos que convienen para tu territorio y eres capaz de movilizar, lo que requiere gestión, expedientes y papel, requiere política en serio”. En este sentido, incidió en que se trata de un “esfuerzo” por el que luego deberán rendir cuentas en Europa y los controles internos del país.
Carmen Calvo insistió en que no se trata de un reparto de fondos al uso, sino de un plan estratégico de España, que “dentro de la desgracia nos vendrá bien para resolver los problemas desde la inteligencia, la prudencia y la lealtad, tres virtudes que hacen mucha falta”.
La dirigente socialista repitió a Mañueco que “no es cuestión de cuanto me toca, sino que problemas tengo en la brecha digital o en la transición verde del modelo económico” y apeló a hacer “un alarde de inteligencia y buena gestión de la política española, lo que requiere mucho más que una frase”.
El Gobierno, dijo, es consciente del problema demográficos de Castilla y León, y de los desequilibrios entre el mundo urbano y el rural, pero debe velar por la igualdad de derechos y expectativas en todas las autonomías y afrontar la diversidad de sus retos. Calvo recalcó que son tan conscientes de esos problemas de envejecimiento que la semana pasada llegaron a la Comunidad, 30 millones solo para dependencia, un dato “récord”.
Asimismo, recordó el millón de vacunas remitidas a la Comunidad, y los 900 millones de euros, que se destinaron a Castilla y León, para proteger la salud de la población durante la pandemia. “Nos preocupamos por igual por todos pero a cada la tendemos con arreglo a sus problemas, a sus anhelos, expectativas y esperanzas, que en el caso a Castilla y León es lo relativo a los desequilibrios entre el mundo rural y urbano y el envejecimiento y la despoblación en un territorio tan grande”.
Asimismo, defendió que las partidas de los Presupuestos Generales del Estado, se dirigieron esencialmente a la despoblación y la dependencia, y “esta es la manera leal con la que nos combinamos con las entidades de la Comunidad, ayuntamientos y Junta”, dijo.
Aseveró Calmen Calvo que también les preocupa la salida de la gente joven de la Comunidad, y apeló a hacer “un esfuerzo enorme” con los 2.100 millones aprobados para políticas activas en el último Consejo de Ministros. Una partida, indicó, cuya partida para el plan de empleo joven debe revertir en Castilla y León “de forma importante” para que este colectivo “se quede en una tierra tan importante para entender la identidad de España”. “Los jóvenes deben percibir que hay futuro y perspectivas aceptables y apetecibles en Castilla y León”, resumió.
Calvo apostó por último porque la sociedad “vea ya mucho entusiasmo por su futuro”, que siga vacunándose y confíe en la ciencia, y sepa que España dispone de recursos propios y de la UE, de los que han adelantado, dijo, 27.000 millones, para arrostrar un futuro inminente, en 2021 y sobre todo 2022 y 2023, salir de la crisis de la pandemia y afrontar “algunas reestructuraciones profundas”.
“Debemos enfilar la ultima parte de la pandemia de forma leal, coordinada y buscando el interés general siempre. Los ciudadanos entienden quienes somos ideológicamente cada uno pero esperan de nosotros que tengamos una capacidad importante de coordinación y unidad para terminar lo que queda de la pandemia y trasladar tranquilidad en el futuro. Tenemos una oportunidad de país extraordinaria con los fondos europeos y debemos sacar de la difícil situación lo mejor de nosotros, “concluyó.
