La consejera de Sanidad, Verónica Casado, aseguró hoy que la vuelta a la presencialidad en las consultas de Atención Primaria no es una reforma sanitaria sino una forma de «organizar» el sistema y «atender» las demandas de los profesionales, en concreto, gestionar la carga de los médicos de Familia.
Ical.- En la rueda de prensa convocada para informar de la actualidad epidemiológica, Casado subrayó que la Junta está «muy preocupada» por la organización del sistema y deseó que exista «consenso».
En este sentido, recordó que, en su momento, se crearon las mesas con los diferentes grupos políticos para alcanzar acuerdos aunque, luego, se rompieron, pese a reconocer que la mejor manera de abordar los problemas del sistema es abordarlos, debatirlos y fijar las posibles recetas de mutuo acuerdo.
En relación a las movilizaciones planteadas en varios puntos del medio rural sobre la presencialidad y la atención telefónico en los consultorios locales, la consejera se mostró esperanzada en que la sanidad no o se convierta en lucha política ni herramienta para agredir al contrario.
No en vano, señaló que las puertas están abiertas a sugerencias que se hacen de forma constructiva. «Lo que realmente nos importa son los profesionales y las personas a las que se dirige nuestra atención», concluyó.