Salamanca conmemora el Día Mundial del Refugiado con el pacto local y provincial de Apoyo a Personas Refugiadas en el que se encuentran: Accem, Salamanca Acoge, Cáritas, YMCA y Fundación Cepaim en colaboración con Ayuntamiento y Diputación Diputación de Salamanca. Todos juntos han organizado actividades conjuntas para dar a conocer la realidad que viven las personas refugiadas y migrantes en nuestro país a través del trabajo que realizan las distintas instituciones, administraciones y asociaciones que se puede ver en la Plaza Mayor este jueves.
Hay una gran población migrante debido a causas políticas, económicas, pero también medioambientales, que cada vez están desplazando a más personas en todo el mundo.
Desmontando mitos. Un ejemplo gráfico y gustoso es la paella. Un plato muy típico de nuestro país, pero tiene unos antecedentes que recorren distintas culturas, como también la música o la selección francesa, si miramos los orígenes de sus futbolistas no son las del típico francés, aunque todos son nacionalizados franceses.
Pero los hay mucho más series y dañinos. «Las personas migrantes o refugiados no se llevan todo el dinero de las subvenciones, pensiones,… ellos vienen a aportar. Por eso, el concepto de estas maletas viajes, donde se puede ir viendo las distintas posibilidades que tienen y cómo participan en nuestra economía», explican Luis Alberto González, de Cáritas Salamanca.
Estas ferias o encuentros que se pueden ver y disfrutar en la Plaza Mayor este jueves dan un poco una visión de que los refugiados y los migrantes salen de su país porque no tienen otro remedios o tienen deseos de mejorar su vida, pero que intentan llegar a nuestras sociedades para aportar. «Una vez que están aquí, las distintas asociaciones e instituciones intentamos que ejerzan los derechos que ellos tienen para que puedan desarrollarse y puedan hacer que nuestra sociedad sea más rica, justa, equitativa y que ellos aporten todo lo que tienen, que es mucho», matiza González.
Los españoles hemos sido migrantes hasta hace dos días, éramos migrantes económicos al centro de Europa, pero en la actualidad también. Todos conocemos a alguien que tiene un hijo de menos de 30 años que está buscándose la vida en otro país y que intenta desarrollar su profesión y capacidades allá donde cree que tiene una posibilidad.
¿Qué le diría a los que piensan que migrantes y refugiados vienen a quitar las pensiones, trabajo,…?
No es cierto. Mirándo los datos aportan mucho más de lo que reciben en la economía. Aportan un volumen muy alto a las pensiones a través de su trabajo, por la edad que tiene. No hay ayudas específicas a la población migrante, excepto lo que es específica de su situación. Por ejemplo, las clases de español, las reciben ellos, pero las de Cáritas están abiertas a todo el mundo. Es verdad que los españoles no las necesitan tanto, pero si quisieran, podrían recibirlas. No hay ayudas específicas para los migrantes, como tampoco se hacen leyes específicas para ellos y las que se hacen son para regular su situación y muchas veces son para ponerles trabas para que puedan regularizarse.
Es fundamental que haya una buena información. A través de ferias como ésta, las personas que lo deseen pueden acercarse a instituciones y asociaciones que van a contarles lo que aportan estas personas que vienen de otros países. «Desde el conocimiento se puede entender porqué vienen y las posibilidades que nos ofrecen», concluye Luis Alberto González, de Cáritas Salamanca.