“Salamanca es una ciudad ombliguera”

[dropcap]L[/dropcap]a Crónica de Salamanca inicia este verano una serie de reportajes sobre leyendas, mitos, cuentos y personas que han deambulado por las calles de la ciudad, unas veces gracias a la literatura y otras al clamor popular, hasta convertirlos en personajes de leyenda. Y en ese conjunto, la ciudad se erige como la matriarca cuyos rincones y calles encierran mucha magia.
Para sacarlos a la luz, nada mejor que echar un rato con Jesús Málaga, primer alcalde de la ciudad y gran conocedor de su idiosincrasia, prueba de ello son los siete libros que ha escrito teniendo como musa a Salamanca.

¿Qué tiene Salamanca para que decida escribir tanto sobre ella?
¡Uff! Salamanca tiene como para escribir 20 veces más, es tan rica en noticias, en acontecimientos… que se convierte en una ciudad ombliguera. Fue el ombligo en acontecimientos muy importantes de la historia de nuestro país en los últimos 250 años como la Guerra de la Independencia, en la Guerra Civil, la posguerrra… esto hace que su pasado sea inabarcable. Y antes de esa época, también, su Universidad, sus conventos, sus sabios,…

Desvélenos algún secreto…
Voy a contar una cosa que muy pocos salmantinos conocen. ¿Conoces la cueva de las múcheres? Está al lado de la Facultad de farmacia, en la parte sur, allí han vivido hasta hace 30 años familias humildes… Cuentan que en esta cueva vivía una mujer bellísima, muy guapa, conocida como la Zagalona, y un poco más allá, estaba la fuente de la Zagalona, que se llamó así porque cada vez que esta mujer iba a buscar agua, los muchachos de la zona se acercaban a ver como la cogía.

Esta leyenda, como todas, tiene su parte de fantasía y su parte de realidad, la fuente existió, aunque la destruyeron para construir el ISPE, y la cueva por supuesto, existe a día de hoy, lo que no sabemos es si existió aquella mujer.

¿Qué más leyendas nos puedes contar sobre Salamanca?
Entorno a la Casa de las Conchas existe otra leyenda que nada tiene que ver con los supuestos tesoros escondido bajo sus conchas, es sobre el hijo de los Maldonado-Pimentel.

Pedro Maldonado-Pimentel fue el jefe de los salmantinos en la batalla de Villalar. El 23 de abril de 1521 se enfrentan en Villalar las fuerzas del rey Carlo I de España contra Los Comuneros, el descontento de Castilla hacia Carlos I se debía principalmente a la política inicial de Carlos, en la que nombraba consejeros de Flandes, extranjeros, y los impuestos iban dirigidos a financiar su campaña imperial. Lo curioso de esta historia es que, a pesar de ser uno de los jefes durante la batalla y perderla, no lo matan gracias al poder de su tío y su abuelo quienes le dijeron algo así: “Oye chiquillo vete pa’ Portugal” y el bobo de él no se fue a Portugal, por lo que fue apresado y enviado a Simanca. Al enterarse el emperador un año después lo mandó matar.
(Entre risas) murió porque fue muy bobo.

Quizá por estos personajes que parecen sacados de una película o por su Casco Histórico que es como un gran escenario, pero también por esa otra parte exotérica…
Un poco por todo. Aquí das un paso y te sale una leyenda, o dos. Voy a contar una cosa interesante: la Cueva de Salamanca la abrí yo siendo alcalde. La tenían de almacén los vecinos. La restauramos y cuando la fuimos a inaugurar, fue como en el cuento del flautista de Hamelín. Venían todos detrás de mí. Íbamos muertos de miedo porque el diablo existe. Existe. Un día, cuando se está haciendo la restauración, llego a la alcaldía y me están esperando los arqueólogos, preocupados.

En las obras literarias se decía que el Marqués de Villena se había escondido en una redoma (una gran tinaja excavada en la tierra) y todo el mundo creía que era una leyenda. Pero cuando se hizo la restauración, apareció allí la redoma. Los arqueólogos no sabían qué hacer, porque si se dejaba expuesta podía estropearse. Lo que hicimos fue datarla y volver a cubrirla con arena para que no se deteriore.

Coincidiendo con la inauguración de La Cueva, hicimos un congreso internacional de brujería. Vinieron personas de todo el mundo. Me llamaron muchísimo la atención las ponencias de arqueólogos y gente dedicada a la nigromancia en Hispanoamérica. En Hispanoamérica llaman ‘salamancas’ a los lugares de brujería, nigromancia, etc. Dicen allí que siempre que se aparece el diablo (como se aparece la Virgen de Fátima) y le preguntan de dónde viene, el diablo dice: “de Salamanca”.

Qué dualidad de santurrones y de casa del demonio tenemos en esta ciudad.
Cuando hablas con americanos ilustrados, confirman que los sitios donde habitan las brujas y donde se echan las cartas, se llaman salamancas.

Pero lo más llamativo del Marques de Villena es que llega a sortear y salir de la iglesia, sube las escaleras y llega al presbiterio, se disfraza de vieja rezando, sale a la calle y todo el mundo le miraba. Había perdido la sombra. Esto se debía a que el diablo había retenido su sombra, la sombra es lo que eres ante el sol.

¿Qué más lugares con leyenda tenemos en Salamanca?
Yo creo que todos, aquí das un paso y te sale una leyenda, o dos.

Con ese juego que propone Jesús Málaga, este verano intentaremos conocer mejor a Don Fili –Filiberto Villalobos-, Juana Pimentel, Feliciana Enríquez de Guzmán, las emparedadas, los picos pardos, el paseo de Unamuno que lo convenció para quedarse, los franceses y alguna que otra casa o rincón que encierra el misterio de siglos pasado, o no tanto…

Por. Aurora Corvo Félix

Bibliografía de Jesús Málaga.

El último libro de Jesús Málaga es La vida cotidiana de la Salamanca del siglo XX, 1923-1939, pero por las estanterías de la librería se pueden encontrar otros libros que llevan la firma de Málaga, todos ellos relacionados con la historia de Salamanca, sus rincones, sus paseos, sus gentes.