Según las encuestas la mayor parte de la población no utiliza el protector solar como debería. Los estudios demuestran que la mayoría no se aplica la dosis necesaria y que una gran parte desconoce cuál es el índice de protección solar adecuado para su piel.
Las encuestas que se van realizando a lo largo de los años han demostrado la necesidad de recordar frecuentemente cómo utilizar adecuadamente el protector solar debido al desconocimiento que hay en torno a su utilización y a qué producto escoger en función de cada piel. Y es que, según las últimas encuestas, solo un 5% de la población se aplica la cantidad necesaria de crema solar. Afortunadamente, cada vez es mayor el número de ciudadanos que adquiere estos productos. Las estadísticas muestran un incremento desde el año 2014, fecha en la que la compra de protectores solares llegó al millón de hogares en España. En 2018 la venta de unidades de productos de cosmética solar tuvo una recaudación de 6.954 millones de euros y en 2019, tan solo en los meses de enero a junio, 4,5 millones de hogares compraron algún tipo de producto solar. Ello se traduce en una sensibilización cada vez mayor por parte de los españoles sobre los efectos adversos del sol.
En cuanto a la aplicación de estos cosméticos, la Comisión Europea indica que para que la protección sea efectiva y se consiga el efecto que indica el envase se debe de utilizar un mínimo de 2 mililitros de producto por cada centímetro cuadrado de piel. Es decir, en el caso de un adulto un total de 36 mililitros para aplicarlo por todo el cuerpo, lo que equivaldría a 6 cucharillas de té. Además, los expertos recomiendan que la aplicación del cosmético se realice cada 2 horas si se está expuesto al sol, aplicándolo en las zonas más sensibles, como es la cara y los hombros. Las recomendaciones se centran, así mismo, en el momento en el que debe aplicarse la crema, concretamente 30 minutos antes de salir de casa, puesto que el tiempo que tardan en actuar los filtros es de 20 a 30 minutos. Además, explican que este debe extenderse de manera uniforme por todo el cuerpo y aplicarse en las zonas olvidadas como son las orejas, la nuca, el dorso de las manos, las ingles, el interior de las rodillas y los pies.
Ahora bien, en el caso de la elección de los solares los especialistas de la piel recomiendan, en primer lugar, que se opte por comprar un producto de calidad. Según un estudio realizado hace unos años por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) los mejores protectores solares de SPF 30 eran Sun Lemmonoil Spray, la crema de Aptonia, Babaria Sun Milk Spray y la leche corporal Nivea Sun Protege&Broncea. En la mayoría de los casos, se trata de marcas populares que no superan los 6 euros por cada 100 mililitros y que pueden adquirirse en las principales tiendas cosméticas, como es el caso de Paco Perfumerías: https://www.pacoperfumerias.com/. Los especialistas recomiendan, asimismo, que en el momento de elegir los cosméticos se tenga en cuenta el fototipo y el SPF, la protección de amplio espectro, los índices equilibrados, la fotoestabilidad, la remanencia, la tolerancia y la cosmeticidad.
Elegir el solar adecuado, el fototipo y el Factor de Protección Solar
Una de las cosas más importantes a tener en cuenta al elegir el protector solar, comentan los especialistas, es el fototipo de piel y el Factor de Protección Solar (SPF). Explican que existen varios tipos de SPF, que varían dependiendo de si ofrecen una protección mínima (SPF de 2 a 6), una protección baja (SPF de 7 a 20), una protección media (SPF de 20 a 35), una protección alta (SPF de 35 a 50) o una protección muy alta (SPF50+). La elección del SPF se debe hacer en función del fototipo de cada uno, que varía en función del color de pelo, de los ojos y de la piel, entre otras. Existen un total de 7 niveles, donde el fototipo I es el más claro y el VII el más oscuro. En España predominan los fototipo II y III que necesitan una protección SPF50+ y SPF30, como mínimo. Recuerdan que para conocer cuál es el fototipo existen varios cuestionarios que resultan muy útiles para identificar el fototipo de cada quien, así como paletas de colores con las cuales comparar el tono de piel con el fototipo.
Características de un buen protector solar
En el momento de elegir un buen protector solar, los expertos recomiendan que se opte por un producto de amplio espectro. Esto quiere decir que el cosmético proteja tanto de la radiación UVB, responsable de los daños inmediatos en la piel —como las quemaduras—, y de la radiación UVA, que ocasiona daños en el ADN de la piel, las células, los tejidos y los vasos sanguíneos. Así mismo especifican que los índices en ambos casos deben ser equilibrados. Recuerdan que cuando esto es así, el símbolo UVA aparece en el envase dentro de un círculo.
Los expertos recomiendan, por otro lado, que en el caso de contar con una cicatriz o una imperfección en el rostro o en el cuerpo será necesario buscar una mayor protección y tener en cuenta una serie de consejos específicos para la correcta utilización de los solares, tal como leemos en este post. En cuanto a la elección de los solares, continúan recomendando que se opte por filtros físicos y no químicos e inorgánicos. Estos se encargan de hacer rebotar los rayos UV, en lugar de ser absorbidos por la piel. Además, añaden que se debe evitar los solares que contengan PABA en su formulación. Indican que el ácido para-aminobenzoico puede ocasionar daños celulares, además de dar lugar a una reacción alérgica. Otra de las cualidades imprescindibles de los cosméticos solares es la fotoestabilidad, comentan, la cual resulta fundamental para que el protector solar se mantenga entre aplicación y aplicación —de ahí la importancia de elegir adecuadamente el producto de calidad, añaden—. A ello suman la remanencia del producto o, lo que es lo mismo, que su fórmula sea resistente al agua, al sudor y a los roces con la ropa y los tejidos.
Lo especialistas matizan, por último, que el cosmético debe contar con un elevado nivel de tolerancia. Es decir, que se adapte perfectamente a cada piel y que esté testado bajo control dermatológico para verificar sus efectos. Concluyen señalando que la cosmeticidad, o textura, debe adaptarse al gusto de cada persona y recuerdan que existen varios formatos en crema, gel, aceite, spray o bruma en cuanto a cosméticos solares se refiere.