El Lidl ya causó sensación con su robot de cocina que finalmente tuvo que dejar de fabricar y vender por ser una copia de la Thermomix, pero a la tercera parte de su precio.
Cada vez que lo ponía a la venta había colas para hacerse con alguna de las contadas unidades que se ofrecían.
Lo que está sucediendo ahora no es equiparable al furor que causaba su robot de cocina, pero el éxito es indudable.
En cuestión de horas se agotaron las 60 unidades que sacó a la venta de su maniquí de planchado y secado para prendas superiores (camisas, camisetas, blusas, jerseys, polos,…). Por 60 horas te puedes evitar el mal trago de darle a la plancha y tener la ropa como nueva en cuestión de minutos (entre 5 y 30 minutos).
En el mercado hay otros productos con más antigüedad, pero con precios superiores.