Quizá te hayas percatado en los últimos días de una nueva modalidad publicitaria que se ha puesto en marcha en el centro de Salamanca.
Se trata de utilizar como soportes publicitarios los escaparates de los locales comerciales que se quedan vacíos.
Una forma más de obtener ingresos por parte de sus propietarios, mientras aparece un nuevo inquilino dispuesto a iniciar una aventura empresarial.
Y como por el centro pasa el mayor flujo de ciudadanos (unas 18.000 personas al día por la calle Toro), no se obtienen una mala audiencia, si es que acabas percatándote de que han puestos esos vinilos para que te compres un piso.