[dropcap]X[/dropcap]osé R. García Bustelo, científico del Centro de Investigación del Cáncer de la Universidad de Salamanca, recogió en Santiago de Compostela el IX Premio Internacional de Investigación Oncológica, Científica y Técnica Ramiro Carregal, dotado con 20.000 euros, en reconocimiento a su labor investigadora en el ámbito preclínico que ha permitido avanzar en el conocimiento del origen del cáncer.
En la gala, pospuesta desde el año pasado a causa de la pandemia y marcada por las medidas sanitarias vigentes, se destacó el esfuerzo y la apuesta por el mecenazgo del empresario gallego Ramiro Carregal, que, por su parte, aseguró sentirse doblemente feliz en el acto “por la difícil situación que hemos vivido y por las personas que han sido premiadas: el gallego Xosé Bustelo, uno de los investigadores más relevantes del momento en el ámbito oncológico, y César Serrano, en la categoría ‘Premio Talentos Emergentes en Investigación Oncológica’, un doctor aún muy joven y con una prometedora carrera”.
Antes de proceder a la entrega de galardones, Rafael López, presidente ejecutivo del Jurado, dio lectura al fallo y relató los méritos que han hecho a los premiados acreedores de tal honor. En el caso del Bustelo, ganador del IX Premio Internacional de Investigación Oncológica, Científica y Técnica, dotado con 20.000 euros, López destacó la “enorme trascendencia de su trabajo en el ámbito de la investigación oncológica, pero también otros aspectos de su carrera, su labor de gestión de iniciativas científicas cooperativas y la mentorización de personal científico”.
Xosé R. García Bustelo (Padrón, 1962) es actualmente vicedirector del CIC de Salamanca, profesor de Investigación en el CSIC e investigador principal en el Centro de Investigación Biomédica del Cáncer (CIBERONC). En su intervención agradeció el premio al Comité Científico y “en especial” a Ramiro Carregal. “Es, desde luego, un ejemplo a seguir no solo por la financiación de este premio sino también porque el fortalecimiento del sector de I+D+i de nuestro país debe venir de la necesaria colaboración entre el sector público, la empresa y las asociaciones de los pacientes”, subrayó.
Bustelo enfatizó la importancia de la investigación preclínica que permite conocer los procesos patológicos que median la aparición y progresión maligna de los tumores y que, al final, llevan al desarrollo de nuevas terapias y herramientas diagnósticas. “Sin esa investigación, no se hubiera producido el incremento tan significativo en la supervivencia y la calidad de vida de los pacientes con cáncer”, señaló. Los avances obtenidos en el conocimiento del origen del cáncer han permitido contar con nuevas terapias y están cambiando también la forma de tratar a los pacientes, “a partir de ahora cada vez será más necesario el uso de la medicina personalizada para adecuar las terapias a las alteraciones genéticas que posee cada paciente”.
Retos pendientes
Pese a lo que se ha avanzado, Bustelo destacó que existen problemas todavía pendientes tanto desde el punto de vista científico como clínico. “El reto es aumentar las tasas de supervivencia de los pacientes con cáncer desde el 55 % actual a al menos a un 75 % durante esta década. Es el objetivo que nos hemos planteado tanto los investigadores como las asociaciones de pacientes” y esto, señaló, “solo se podrá hacer a través de tres cosas: investigación, investigación y más investigación”.
También destacó que, para que Galicia y España tengan un papel relevante en este campo, “se necesita acabar de una vez con la infrafinanciación de la ciencia en nuestro país. No se puede ganar una carrera de fórmula 1 con un 600”. Solventar este punto, indicó, “exige una financiación adecuada y estable en el tiempo, crear centros de investigación integrada en esta patología, favorecer la innovación empresarial y eliminar la burocracia que ahoga a los investigadores de nuestro país”.
La labor del investigador fue puesta como ejemplo de trabajo en pro de la sociedad tanto por el alcalde de Santiago, Xosé Sánchez Bugallo, como por el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, quienes cerraron el acto que fue retransmitido en streaming para facilitar la asistencia de quienes no pudieron estar presentes en el Hostal por las restricciones de aforo. En el deseo de todos está retomar la “normalidad” el próximo año, coincidiendo con el décimo aniversario del Premio, una edición que tiene abierto ya el plazo de presentación de candidaturas.