Una noche más, una multitud de jóvenes abarrotó la zonas zonas de copas de la ciudad incumpliendo las medidas básicas de prevención como llevar las mascarilla o guardar la distancia de seguridad, a pesar de la presencia de agentes de la Policía Local en la zona de San Justo, donde tuvieron que intervenir.
El entorno de la zona baja de Gran Vía junto con Varillas y San Justo estaban como en sus mejores tiempos de la movida nocturna salmantina (hace décadas), con las terrazas llenas y las calles, también.
Un panorama similar se podía observar en la zona de la Plaza de Monterrey y Bordadores, con las calles llenas de jóvenes de fiesta.
Y lo mismo ocurría en la zona de Bermejeros/ Plaza de la Reina, donde están las discotecas más concurridas.
Las terrazas de restaurantes y cafeterías también estaban casi llenas. Una noche incluso mejor que las de la anormalidad.
Y todo ello en contraste con el concierto de Pitingo en Puente Ladrillo, y de pago, con unas decenas de espectadores.