«Es absolutamente inconcebible lo que estamos viviendo los vecinos de esta zona en la calle Bermejeros. Se están violando con total impunidad los derechos fundamentales de las personas que viven en esta zona; derecho a la salud, al descanso, a una vivienda digna, incluso a trabajar que es imposible con la contaminación acústica existente», indica una vecina que sufre las consecuencias del ocio nocturno en la zona.
Decenas de personas se agolpan frente a la discoteca y ahora hacen además cola debajo de edificios residenciales para poder entrar en la discoteca, «impidiendo el acceso de los vecinos y vehículos a los inmuebles, sin respetar ninguna de las normas ya sean anticovid (sin mascarillas, sin guardar distancia de seguridad, etc), o contra el ruido (tanto europeas como nacionales), ni de las ordenanzas municipales de convivencia que prohíben las aglomeraciones , o bebidas en la calle, etc.», señala.
Afirma que esto ocurre «todos los días y a todas horas, tarde y noche, a lo que se ha añadido a la contaminación acústica de los locales de ocio y terrazas la creada por la desviación de la circulación de vehículos por esta calle tras el corte al tráfico de la Calle Correhuela por la Policía Local, sin motivo ni justificación alguna, así como el incremento indiscriminado de terrazas en La Plaza de La Reina y de su aforo, que se hace en función se las necesidades de los locales de ocio».
Explica que existe «permisividad» por parte de las administraciones públicas» y de la Policía Local que hacen caso omiso a las llamadas de los vecinos y con pleno conocimiento de la situación a través de las numerosas denuncias realizadas día sí y día también desde abril. Todo ello en una zona residencial y protegida», concluye.