Concebido, mimado y pulido en Salamanca, el documental biográfico de Chema de la Peña sobre Charo López, titulado ‘Me cuesta hablar de mí’, aterriza mañana martes en la 66 edición de la Semana Internacional de Cine de Valladolid con el fin último de arrojar algo de luz sobre los aspectos más recónditos de la vida de la artista, ocultos hasta ahora por propia convicción. De salmantino a salmantina, cineasta y actriz confluyen en un film que trasciende a la trayectoria profesional de la intérprete y descubre al espectador nuevas dimensiones en su plano más íntimo. Tanto, como «sus sinsabores, éxitos, pericias, reinvenciones y saltos adelante”.
Javier A. Muñiz / ICAL
Son palabras del director Chema de la Peña, quien regresa de la mano de Charo López a un festival que, tras su debut hace más de una década con ‘De Salamanca a ninguna parte’, conoce como la palma de su mano. De hecho, el cineasta salmantino ha presentado en Valladolid prácticamente todos sus trabajos, aunque no de ficción, sí documentales, y reconoce a Ical que será un regreso “muy placentero”, ya que alberga «un punto de orgullo”, precisamente, por poder lucir «en casa”. Durante la cita, que arrancó este sábado, De la Peña proyectará un audiovisual rodado íntegramente en Salamanca en el que trata de acortar «la mucha distancia» que había entre la esfera pública de la actriz y su vida privada.
“Siempre ha sido muy recatada, en el sentido de intentar que su vida personal no trascienda. De hecho, tuvo muchas dudas antes de lanzarse a hacer el documental”, según explica Chema de la Peña, quien reconoce que, en efecto, le costó mucho trabajo convencer a la actriz para llevarlo adelante. La causa radica, precisamente, en que su idea era ir “más allá” de una trayectoria profesional que sus coetáneos, probablemente, tendrían «más presente”. “Yo le insistía a Charo en que una mujer con su peso y con su experiencia vital tiene muchas cosas que contar a las nuevas generaciones, tanto a los actores que están empezando en el gremio, como a sus propios fans”, subraya.
Así, propone a quienes tal vez no tengan el debido bagaje sobre la vasta dimensión de Charo López en el cine español, desde su debut con ‘Ditirambo’ en 1985 hasta su Goya a mejor actriz de reparto por ‘Secretos del Corazón’ en 1997, seguramente por una cuestión generacional, que descubran la trayectoria vital de una actriz a lo largo de toda una carrera. “Normalmente, estamos acostumbrados a verla en un momento de éxito o de fracaso, pero ver todo el recorrido es súper interesante», recomienda.
Por otro lado, insinúa que van a descubrir a «una mujer adelantada a su tiempo, muy valiente, que se enfrentó a un mundo de hombres, donde se le consideraba solamente por el valor de su propia belleza y nada más, y que se reveló como una excelente actriz que decidió tomar las riendas de su carrera”. En este sentido, Chema de la Peña recuerda que, en un momento dado, Charo López tuvo «el coraje» de lanzarse a producir sus propios proyectos. Algo que, dese su punto de vista, le confiere el carácter de “mujer singular” que supo asumir las decisiones concernientes a su carrera. “No siempre con acierto”, matiza, “pero sí, siendo fiel a ella misma”, aunque eso le costara, a menudo, “enfrentarse a la industria cuando no aceptaba lo que le ofrecían”.
El cineasta, 20 años más joven, atesoraba antes de afrontar este proyecto aquella imagen del icono que permanece en la memoria colectiva y es común a toda una generación. “Una belleza inteligente, hasta cierto punto distante, inalcanzable de alguna manera, y sobria”, según describe. La “gran sorpresa” que De la Peña se encontró al acercarse a la actriz y profundizar en su devenir durante «casi un año» de contacto estrecho es que, según revela, “detrás de esa figura, hay una mujer que tiene un sentido del humor impresionante, muy cachonda, y con una parte muy mundana, como muy de la calle, a la que le encanta la gente”.
Cuando empezó a investigar al personaje buceando en los archivos del NO-DO y de Televisión Española, De la Pela asegura que descubrió una “frase recurrente” desde los años 70. Una afirmación que escucharía por sí mismo de los labios de la propia actriz y que acabaría resultando del todo significativa. “En muchas entrevistas le escuchaba decir: ‘No, es que a mí me cuesta mucho hablara de mí’. Me llamó la atención”.
A partir de ahí, explica que conoció a una mujer “de muchos contrastes”, que «es cierto que tiene una una parte de pudor” y que por lo tanto, “le cuesta abrir su mundo cercano, su mundo interior, a quien no conoce”, pero que, por otro lado, al ser actriz, “tiene una parte exhibicionista», que «le gusta mostrarse, ser querida, aceptada y reconocida”. Entre esos dos contrastes pivota el título de la película. Incluso López le reconoció que fue «la primera vez que se abría tanto contando cosas”.
Experiencia apasionante
Un detalle que la propia Charo López confirmó a Ical con palabras muy similares. “El documental ha sido una experiencia muy nueva para mí porque, a lo largo de mi trayectoria profesional, no he dado ninguna entrevista personal, hablando de mí. O muy pocas, no recuerdo apenas”, comenta la actriz justo un año después de ser galardonada en la Seminci con la Espiga de Oro, dispuesta a vivir en esta edición “algo muy diferente” con el film de su ‘paisano’.
Sin embargo, sostiene que con Chema de la Peña fue lo contrario. “Del principio al final estuve hablándole de mi trabajo, de mi familia y de mis amigos. Ha sido una experiencia muy nueva, muy apasionante y, a ratos, agotadora”, reconoce la intérprete con una sonrisa, porque, según explica, el cineasta es «un hombre muy seguro de lo que quiere”. “Me ha entrevistado sin piedad durante horas. Hemos hablado mucho, pero para mí ha sido una experiencia preciosa”, certifica.
Así, relata cómo surgió la idea para titular el film. “Cuando nos conocimos yo le dije: ‘Chema, yo tengo un problema: me cuesta mucho hablar de mí». Alí estaba otra vez la frase que había llamado la atención del director, como una revelación de lo más oportuna. «Seguimos hablando durante un rato y al poco supo que ese iba a ser el título. Así que le dije: ¡Anda, qué fácil lo haces, tío! A mí me cuesta mucho”, rememora la actriz con naturalidad sincera.
Charo López regresó a su tierra en marzo tras haber rodado en el pasado con grandes nombres como Basilio Martín Patino. Durante el documental, revisita los lugares emblemáticos de aquella ‘Los paraísos perdidos’ de 1985, pero también emerge en el Liceo, Anaya o la Plaza Mayor, además de otros espacios de especial significado en la provincia charra. “Tenía ganas de pararme a ver a la gente, a dar besos a mis amigas y entretenerme por las calles, pero cuando vas a trabajar no hay tu tía”, recuerda sobre su paso por la capital tormesina, cuyo Ayuntamiento a través de la Film Comission colaboró aportando unos 5.000 euros al proyecto.
Mientras esperan a que ‘Me cuesta hablar de mí’ se muestre al gran púbico y que, por fin, se emita en el espacio ‘Imprescindibles’ de Televisión Española, ambos continúan avanzando en otros proyectos. En la actualidad, la intérprete está inmersa en una gira teatral de recitales en la que le acompañan un barítono y un pianista. Chema de la Peña, por su parte, espera estrenar en 2022 un ‘thrilller’ basado en la novela de Luis Oliveira titulada ‘Las buenas costumbres’ que rodó en México tras el éxito cosechado durante 2016 en el país azteca con ‘Vive por mí’.