El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla afeó este viernes a Castilla y León que Cantabria se haya encontrado “un poco sola” en las reivindicaciones de la autovía A-73 que permite la comunicación de la zona oriental de la Comunidad. El presidente cántabro acudió a la provincia de Burgos, donde asistió a la puesta en servicio del tramo entre Pedrosa de Valdelucio (Burgos) y Báscones de Valdivia (Palencia) de la citada vía.
Ical.- “Esta obra no ha tenido una reivindicaciones desde Castilla y León como lo está teniendo desde Cantabria desde hace tiempo”, denunció durante su intervención, recordando que estas obras, pese a ser del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, son fundamentales para ambas comunidades.
Por ello, y tras recordar el desarrollo que han tenido las obras de esta autovía en la última década, pidió a la titular de Transportes, Raquel Sánchez, “un poco de agilidad” para la finalización de estos trabajos. “Es terrible lo de esta obra”, dijo, criticando el tiempo que ha pasado desde que se iniciaron los trabajos en esta vía.
En este sentido, pidió que los cántabros puedan realizar el “trayecto lógico” desde Santander a Madrid sin tener que pasar por el pueblo de Osorno, que les permitiría “ahorrar combustible y abreviar el viaje de Santander a Madrid en unos 15 minutos”. Pese a ello, destacó que la “pinta” de la obra es “muy buena”, afirmando que la empresa ha hecho una “gran obra”, y espera poder utilizar algún día esta “obra faraónica”.
Asimismo, recordando las palabras del consejero de la Presidencia de la Junta, Ángel Ibáñez, que hizo un llamamiento para apostar por la España de interior, Revilla subrayó estas palabras, pidiendo apostar “por la periferia y las zonas rurales”. “Madrid se está convirtiendo en un pulpo que se lo lleva todo, ahí confluyen todos los puertos, aeropuertos y autovías”, dijo, recordando que existe otra España “que no quiere abandonar su tierra”, reclamando así unas “infraestructuras adecuadas”.