La policía italiana ha detenido a un hombre de 50 años que intentó recibir la vacuna contra el coronavirus en un brazo falso de silicona. Ahora se enfrenta a cargos por un delito de fraude.
El suceso ha tenido lugar este jueves por la noche en Biella, ciudad cercana a Turín, en el norte de Italia. El varón acudió a ponerse la vacuna contra el coronavirus para obtener el certificado de vacunación. El dato llamativo, y que ha conllevado su detención, ha sido que trató de recibir el suero en un brazo falso de silicona. Según han informado diferentes medios internacionales, los sanitarios, al percatarse, no se dejaron engañar y denunciaron al hombre.
El jefe del gobierno regional de Piamonte, Albert Cirio, ha declarado que “el caso roza lo ridículo. Si no fuera porque estamos hablando de un gesto de enorme gravedad”. Además, ha calificado los hechos como “inaceptables frente al sacrificio que toda nuestra comunidad ha realizado durante la pandemia, en términos de vidas humanas, el costo social y económico”.
Inicialmente el hombre completó los trámites burocráticos previos y firmó el consentimiento frente al médico. Este, mientras preparaba la inyección, no se percató de que el brazo era de silicona. La sanitaria Filippa Bua ha confesado a ‘La Repubblica’ que se sintió “ofendida como profesional”. “El color del brazo me hizo sospechar y le pedí al hombre que descubriera el resto de su brazo izquierdo. Estaba bien hecho, pero no era del mismo color”, ha detallado.
En ‘La Stampa’, Bua ha explicado que no podía ver las venas al hombre y ha dado más detalles: “al principio pensé que había cometido un error, que era un paciente con un brazo artificial”. Por el momento se desconoce si el varón llevaba el brazo falso completo o si, por el contrario, era algún tipo de capa de silicona sobre la piel.
Al parecer, era un antivacuna, pero para obtener el certificado de vacunación intentó colar su brazo artificial.