La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha avisado de los riesgos que supone llamar a ciertos números de teléfono. En la mayoría de los casos, una de estas llamadas puede incrementar significativamente la factura telefónica.
Según la OCU, cada llamada puede tener un coste distinto, además ha explicado en su página web de qué se trata cada número diferente a 6.
- Números 800: están reservados para teléfonos en los que se presta un servicio durante la llamada. Hay diferentes tipos según sus tres primeros dígitos. 803 para servicios para adultos. 806 para entretenimiento, juegos o el tarot. 807 para servicios ofrecidos por profesionales como médicos o asesorías.
- Números 900: pertenecen a las administraciones o a servicios de atención al cliente. También se diferencian según sus tres primeros dígitos. 900 pertenecen a números en que la llamada es gratuita. 901 es empleado generalmente por la Administración Pública, la Agencia Tributaria o la Seguridad Social, en este caso se paga parte de la llamada. 902 pertenecen a números en que se paga el coste íntegro de la llamada. 905 se utilizan para servicios de televoto cuentan con una tarificación especial y se paga un importe íntegro por llamada. 907, 908 y 909 se utilizan para usuarios que se conectan a través de Internet para la prestación de servicios.
- Llamadas al 118: son números utilizados como ‘guía telefónica’. Sus precios varían dependiendo de quién ofrezca la información y no se consideran servicios de tarificación adicional. Según la CNMC el precio medio de una llamada de un minuto es de 5,56€. Para evitar sorpresas en la factura se han establecido las siguientes medidas: información previa del precio, limitación de diez minutos para la llamada, tarifas sin establecimiento de llamada, petición formal y expresa del usuario en llamadas que superen los 2,5€.