El empresario Elon Musk es conocido por su tendencia a la innovación. Prueba de ello es la estrategia que sigue en los procesos de selección para cubrir las vacantes de personal. A la hora de contratar a sus trabajadores, Musk ha decidido dejar a un lado los títulos académicos como método principal con que medir la valía de los aspirantes.
El CEO de Tesla considera que las habilidades de una persona pueden demostrar que tiene más valía que los títulos que posea. De esta manera, el proceso de contratación de empresas como SpaceX se basa en una prueba denominada “prueba de dos manos”. En base a ella se califica a los candidatos a través de experiencias prácticas.
Por lo tanto, en las empresas de Elon Musk, además de la entrevista de trabajo, se pretende determinar el nivel de conocimiento del candidato. Por eso los aspirantes se someten a la realización de pruebas que se aproximan lo más posible al rol que se van a desempeñar en el puesto que pretenden ocupar. Gracias a estos métodos logran examinar con eficacia al posible trabajador a través de las diferentes tareas.
A pesar de ello, un estudio de la Asociación de Colegios y Universidades Estadounidenses ha determinado que tres cuartas partes de los reclutadores consideran la titulación universitaria como algo esencial. Esto se debe a que durante la etapa universitaria se adquieren las habilidades blandas. Algunas de ellas son la creatividad, la inteligencia emocional o la resiliencia y que, además, son difíciles de evaluar en una entrevista de trabajo.