Pilar Alegría, ministra de Educación y Formación Profesional, destacó este miércoles en Salamanca los 234 millones de euros que el Gobierno de Pedro Sánchez transfiere en base al presupuesto de 2022 a Castilla y León en materia educativa. De ellos, según sus cifras, 124 millones están destinados a becas para que “más de 45.000 jóvenes de esta tierra puedan formarse”.
J.M.A. / ICAL. De igual manera, en base al presupuesto, Alegría destacó los 11.300 jóvenes castellanos y leoneses que serán beneficiarios de la partida destinada a la FP, otro de las medidas que, desde su punta de vista, demuestran que la educación es “una prioridad” para el Gobierno de España. Tanto como los 38 millones de euros que serán transferidos a la Junta para que 3.765 familias “puedan disfrutar de una plaza de educación de cero a tres años pública y gratuita”.
La titular de la cartera de Educación visitó este miércoles Salamanca para reunirse con representantes de diferentes colectivos del sector educativo. El encuentro tuvo lugar en el sede socialista de la capital del Tormes y sirvió para que Alegría trasladara su “reconocimiento y agradecimiento” a los profesionales tras 20 meses de pandemia por su “magnífico trabajo” todo este tiempo. Una labor que, según matizó, “ha permitido que los jóvenes sigan pudiendo acceder ala educación de manera presencial y garantizar que pudieran seguir acudiendo a las escuelas, que se convirtieron en entornos seguros”.
La pandemia, sin embargo, fue también el objeto de protesta de algunos colectivos del sector de las escuelas de idiomas que le hicieron entrega a la ministra de un escrito a su llegada, reclamando ayudas para paliar el déficit de ingresos por culpa de las restricciones a la movilidad internacional durante estos meses. Una vez dentro, la ministra expuso las distintas cuestiones que está desarrollando el Gobierno desde que el pasado mes de diciembre de 2020 se aprobar la Lolmloe. “Estamos desarrollándola como corresponde y durante el último Consejo de Ministras aprobamos el real decreto de Enseñanzas Mínimas”, recordó.
Por otro lado, Pilar Alegría destacó la Ley de Formación Profesional, “nacida del consenso y del debate”, no solo con los agentes sociales sino con 22 de los 23 partidos que forman el arco parlamentario, ya fuera con un voto afirmativo o con una abstención. Todos, excepto el Partido Popular, a quien acusó de “negacionismo” ante una ley que “permite facilitar el acceso al mercado laboral a los jóvenes mediante un trabajo estable y remunerado”. Por último, se refirió ante los colectivos a la reforma de la profesión docente.
La nueva Ebau
La ministra se refirió a la nueva prueba de acceso a la Universidad que, según recordó, se pondrá en marcha en verano de 2024. “Está en fase de trabajo. Estamos haciendo pruebas y estudiando lo que se está haciendo en otros países. El trabajo es continuo con la Conferencia de Rectores y siempre teniendo en cuenta los criterios de las comunidades autónomas”, resumió.
En este sentido, Alegría incidió en que dichos criterios, los autonómicos, incluida Cataluña, según especificó la prensa, serán tenidos en cuenta junto a otros “homogéneos”, y recordó que las competencias están transferidas en materia educativa. “El Gobierno cumple con sus obligaciones y por eso estamos aprobando los reales decretos de Enseñanzas Mínimas. A partir de ahí, las comunidades autónomas tendrán que desarrollar sus currículos y a la que tienen lengua cooficial les corresponde extender esos currículos al 50 por ciento”, manifestó.
En último término, la ministra negó que la nueva legislación haya arrinconado a la filosofía, afirmando, por contra, que “está más presente que nunca”. Se refirió a la asignatura de Valores Éticos y Cívicos como obligatoria en quinto o sexto de Primaria y tercero o cuarto de ESO. “Anteriormente, con la Lomce, los querían cursar filosofía, lo debían hacer desde las optativas y, sin embargo ahora tendrán que estudiar todos mediante esta materia”, matizó. Además, recordó que las asignaturas de Filosofía e Historia de la Filosofía son obligatorias en Bachillerato.
