Allá por febrero de 1998, Javier Castellanos y Miguel Ángel Rodero crearon una web que se acabó convirtiendo en la más popular entre los estudiantes de habla hispana. Se trata de ‘El Rincón del Vago’, creada en Salamanca como consecuencia de un trabajo de religión que les mandaron.
Con casi un cuarto de siglo a sus espaldas, ‘El Rincón del Vago’ es uno de los portales más conocidos en el ámbito estudiantil. En esta plataforma, los usuarios suben documentos como apuntes y trabajos, y posteriormente otros estudiantes los reutilizan. A pesar de que actualmente este sitio web pertenece a Orange Horizons, fue fundado por los salmantinos Javier Castellanos y Miguel Ángel Rodero.
Mara Torres ha entrevistado en ‘El Faro’ de la Cadena SER a estos dos informáticos, creadores de una de las webs más populares entre los estudiantes. Durante la charla han repasado desde los orígenes del portal hasta la evolución que llevó a ‘El Rincón del Vago’ a convertirse en la web referencia de muchos alumnos. Se trata de un portal más longevo que Google, pues el primero se creó en febrero de 1998 y el segundo a finales del mismo año.
La historia comienza en 1998, cuando estaban estudiando Informática en la Universidad Pontificia de Salamanca. Un día les mandaron hacer un trabajo de religión y, como habían estado “13 años en los Salesianos, ya habíamos hecho todos los trabajos de religión que uno tiene previsto hacer en su vida”, bromean. Por ello, decidieron conseguirlo “por otro sitio”. De esta manera, “si alguien lo tenía hecho, nosotros se lo cambiábamos por otro que tuviéramos hecho”. A pesar de ello, no tuvieron suerte y no consiguieron el famoso trabajo, por lo que “al final, lo tuvimos que hacer”.
Sin embargo, esta anécdota supuso el origen de su idea. “Teníamos 6 o 7 trabajillos que nos había tocado hacer en Empresariales, y los colgamos a modo de reclamo. Empezó como un tablón, intentando saber cómo se hacía una página web, porque en 1998 estaba todo en pañales. Y, poco a poco, dimos con la tecla para que empezara a entrar gente. Luego fue una explosión brutal”, recuerda Javier. “Al principio era muy poca la gente que entraba, cada vez el tráfico iba aumentando y llegamos a tener dos millones de personas diarias. Una auténtica barbaridad”, apunta Miguel Ángel.
En cuanto al origen del nombre, Javier explica que “es muy salmantina la historia. Estábamos en la Plaza Mayor y yo le puse el tema de la web, y a Miguel le salió inmediatamente el nombre”. Por su parte, respecto a la elección del buitre como ‘mascota’, revela que fue “porque lo hacíamos en mi habitación, y tenía una colección en la estantería de Félix Rodríguez de la Fuente”. Además, el otro motivo tiene como origen “lo de ‘buitrear’ los apuntes”. “Y juntando las dos cosas, un amiguete nuestro que era ilustrador, nos hizo la mascota. La verdad que venía a cuento”.
Poco a poco, ‘El Rincón del Vago’ fue ganando popularidad. “Lo que funcionó al principio fue el boca a boca. Empezamos a publicitar la página entre los amigos, en las facultades de Salamanca, íbamos a las universidades y bibliotecas y cambiábamos la página de inicio de los ordenadores por la de ‘El Rincón del Vago’… Marketing de guerrilla”, bromea Miguel Ángel. Entonces, “hubo un momento en el que los medios se fijaron en nosotros y empezamos a salir en televisión, en prensa… Y en ese momento fue un momento de explosión. Los grandes números llegaron ya cuando indexamos en buscadores y demás”, relata.
Sobre los motivos que llevaron a este portal al éxito y han hecho que siga activo, Javier se muestra tajante. “El éxito es que la gente no quiere perder el tiempo en cosas que están hechas. Muchas veces el sistema educativo es repetir, copiar, hacer trabajos… y muchas veces decías: ‘¿Para qué me voy a molestar?’ Luego, hemos vivido la era de la colaboración, las redes sociales, de todo lo común, y eso es muy estudiantil. Entonces, llevamos al canal digital lo que ya sucedía en muchas cafeterías o pasillos de facultades”.
Por último, en lo referente al dinero, Javier indica que “el primer patrocinador nos pagó 1.000 pesetas (6 euros si eres millennial). Entonces empezó el negocio publicitario online en España, nos contactó una agencia que nos consiguió anunciantes de verdad, marcas de primer nivel”. Tras la venta del portal, se ha especulado mucho sobre la posible fortuna que habrían obtenido. “Seguimos trabajando. Y en nuestra generación, a poco que podamos, dejamos de trabajar. Es verdad que nos posibilitó hacer cosas con 30 años que, si te va bien, consigues a los 50. Pero no para retirarnos”, aclara Javier. “Nunca tuvimos la intención de ir a Andorra”, concluye irónico Miguel Ángel.