- El PP gana dos procuradores con el adelanto electoral y Vox se dispara
- Duro castigo a Cs, que queda al borde de la extinción, y al PSOE que pierde los comicios y siete procuradores en beneficio de UPL y Soria Ya
El adelanto electoral ha generado un terremoto en Castilla y León, con un resultado que deja un parlamento regional más fragmentado en el que gana peso la ultraderecha.
El PP ha ganado las elecciones por 16.000 votos sobre el PSOE, pero solo consigue dos procuradores más que en 2019, de forma que los 31 que obtiene quedan lejos de la mayoría suficiente que buscaba para gobernar en solitario.
Consigue dejar al borde de la extinción a Cs (pasada de 12 a un procurador), pero el que ha cogido fuerza ha sido Vox, que pasa de uno a los 13 de este domingo y se erige como el principal beneficiado del proceso electoral. El PP se deshace de Cs, pero necesitaría a un Vox crecido para la próxima legislatura.
El gran derrotado es el PSOE, que, pese a quedar cerca del PP en votos, sufre una sangría y se deja en el camino siete procuradores, lo que le aleja de cualquier combinación posible para poder disputar el gobierno de la Junta al PP. Un varapalo que tampoco casa con las expectativas que se habían generado en la última semana de la campaña en la que se hablaba de un empate técnico con el PP. Buena parte de la fuga de votos del PSOE y cuatro de sus siete procuradores perdidos han ido a parar a los partidos localistas, como UPL y, sobre todo, Soria Ya que ha recibido el 42% de los votos de los sorianos (y el 50% solo en la capital).
Con el 100% de los votos escrutados, pierden votos el PP (55.000), PSOE (117.000) y Cs (151.000), y los ganan los demás. Sube extraordinariamente Vox (gana más de 137.000 votos) y en menor medida Unidas Podemos logra 61.000 -en 2019 fueron por separado y ahora entran en Las Cortes pro los pelos-, Soria Ya (logra 18.000 en su primera cita), UPL gana 24.000 y XAV sube 4.400.
Ahora se abre un periodo de incertidumbre sobre que harán el PP, ganador de la cita electoral, y Vox. El PP puede ofrecer a Vox un gobierno de coalición, o que le apoye desde fuera o negarle el acuerdo de Gobierno y buscar su abstención y el apoyo de otros partidos minoritarios según las circunstancias. O convocar nuevas elecciones. «Voy a formar un gobierno de todos y para todos. Voy a dialogar con todas las fuerzas políticas, empezando por las de mayor representación. Quiero alcanzar acuerdos para un gobierno eficaz, estable y permanente sin amenazas permanentes de mociones de censura», señaló Mañueco el domingo por la noche.
Vox, por su parte, dijo en campaña que solo pactaría con el PP, pero ahora ya «poniendo encima de la mesa nuestro programa de gobierno», según señaló eufórico su presidente Santiago Abascal este domingo tras conocer el resultado electoral, y adelantó que Vox entrará en el Gobierno de la Junta.
El secretario general del PSOE y candidato a la Junta, Luis Tudanca, asumió la derrota de su partido en estas elecciones autonómicas en las que consideró “Castilla y León ha hablado”. “Tener claro, que otros vendrán y que harán más y lograrán que el cambio llegue a esta tierra, porque esta tierra lo merece”, dijo como si anticipara su marcha.
Panorama con el 100 por ciento de los votos escrutados: Ver los resultados, aquí
