Lo que ha pasado en Salamanca este domingo en las elecciones autonómicas es un reflejo de lo que ha ocurrido en el conjunto de la región, con una victoria del PP, pero perdiendo votos, un duro castigo para el PSOE y el auge de Vox que se reparte con el PP el electorado de Cs.
Con el 99,5% de los votos escrutados, el PP consigue 65.163 votos (8.000 menos que en 2019), seguido del PSOE con 49.447 (son 14.000 menos) y de Vox, que se convierte en la tercera fuerza política de la provincia gracias a sus 30.192 sufragios (21.000), mientras que Cs se queda con 8.300 tras perder precisamente 21.000 votos.
Solo en la capital el PP consigue el 38% de los votos frente al 30% del PSOE, lo que ahonda las diferencias. Los populares suman 27.402 votos (352 más que en 2019) frente a los 21.746 de los socialistas (3.522 menos).
Vox consigue el 16% de los sufragios (11.538 en la capital), lo que supone 8.000 más que en 2019, mientras que Cs se queda con el 5% gracias a sus 3.804 votos (8.100 menos).
