Día del Árbol

De los plantados en 1980 solamente sobrevivieron el 40%, la mayor parte de ellos acabaron tronchados por gamberros

[dropcap]E[/dropcap]l servicio municipal de Parques y Jardines organizaba en marzo la Semana o el Día del Árbol. En 1980 se celebró la primera semana con la participación de los centros escolares de la ciudad. En 1982, la tercera semana del árbol, se inscribió dentro del “año verde” con la apertura de nuevos parques, Jesuitas, Picasso y Garrido, y con la mejora de los existentes. Se plantaron dos mil árboles y cinco mil arbustos. Los escolares, animados por el IME, realizaron trabajos alusivos al cuidado de los árboles. 800 de ellos fueron expuestos en el más antiguo de nuestros parques, el Campo de San Francisco, donde también se proyectaron películas, se realizaron representaciones teatrales sobre temas ecológicos y se editó un número del periódico infanto-juvenil “Corrillo” alusivo a la semana del árbol. Los barrios que recibieron plantaciones en 1982 fueron San José, Garrido, Vidal, San Bernardo y Pizarrales.

Creo que los salmantinos deben saber algunos datos sobre nuestro comportamiento con los árboles. De los plantados en 1980 solamente sobrevivieron el 40%, la mayor parte de ellos acabaron tronchados por gamberros. En 1981, con una intensa campaña de protección de la naturaleza, subsistieron a la mortandad el 60%. En tan solo un año habíamos conseguido que los salmantinos respetasen más a los árboles.

En 1983 cada ciudadano pudo plantar un árbol, nada más tenía que solicitarlo al Ayuntamiento. Se celebró la plantada el 13 de febrero, en las márgenes del río Tormes. Se repobló la zona con 5.000 árboles: chopos, plátanos, aceres y catalpas. Así mismo se plantaron 30.000 aligustres. Se repusieron los árboles de Navidad que previamente se habían recogido y, como buena noticia, a lo largo de ese año solamente se perdió el 10%, de la plantación, cifra que está considerada como normal por los expertos.

Los escolares visitaron el vivero municipal y el Huerto de Calisto y Melibea, y aquellos colegios que lo solicitaron pudieron plantar árboles en sus patios de recreo. Muchos ciudadanos acudían al acto de la plantada ciudadana. Algunas personas mayores recordaban que la fiesta del árbol se celebraba festivamente durante la República. En aquellos años tenía un fuerte arraigo ciudadano.

En la plantación de 1993 José Luis Martín, el primer gobernador civil socialista de Salamanca, hizo un alarde de saber usar la pala y conocer la técnica, siendo la admiración de todos los presentes.

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