La Central Sindical Independiente y de funcionarios (CSIF), un año más, apuesta por la matriculación en la educación pública. Destaca el esfuerzo que ha realizado su profesorado durante el presente curso escolar que, otra vez, ha sido marcado por las consecuencias de la pandemia del COVID-19. Pese a las numerosas dificultades afrontadas, los docentes, junto con el resto de la comunidad educativa, han conseguido mantener abiertos los centros escolares
CSIF resalta el valor de la red de centros públicos, que demuestran que la educación pública en Castilla y León llega a todos los rincones, contribuyendo a paliar los problemas de la despoblación. “La educación pública es la única que está presente en todas las comarcas rurales, garantizando la igualdad de oportunidades de todo el alumnado castellano y leonés”, asegura.
A la calidad de la docencia en Castilla y León, contrastada por estudios internacionales, se suman más motivos por los que CSIF anima a las familias, a matricular a sus hijos e hijas en centros públicos.
Entre ellos, se encuentran la gran variedad de enseñanzas y programas educativos que se ofrecen al alumnado; la garantía de la equidad, para que todos los niños y niñas tengan las mismas oportunidades de vida y de conocimiento; así como la amplia participación de la comunidad educativa en la gestión de los centros. Además, los centros públicos permiten conciliar la vida familiar gracias a la gran variedad de servicios que ofrecen: comedor escolar, programa ‘Madrugadores’, transporte escolar, una gran oferta de actividades extraescolares, y su implantación en todo el ámbito rural de Castilla y León, explica.
CSIF afirma que los centros públicos son garantía de que la formación del alumnado se hará bajo las premisas de la libertad, neutralidad ideológica y solidaridad, con el ánimo de construir una ciudadanía crítica y solidaria. Precisamente, es sobre la educación pública sobre la que recae casi todo el esfuerzo de sacar adelante al alumnado con necesidades especiales, o con problemas de integración, añade.
El inicio del proceso de admisión ordinario empezará el 10 de marzo de 2022 con la publicación de las vacantes, y el plazo de presentación de solicitudes irá del 18 de marzo al 6 de abril, ambos inclusive. Posteriormente, el baremo provisional saldrá publicado el 16 de mayo, y habrá un período de reclamaciones desde el 17 al 23 de mayo, siendo el 23 de junio cuando se publicarán las adjudicaciones definitivas.
El 30 de mayo será la fecha del sorteo público, que se celebrará en la sala de la Dirección General de Política Educativa Escolar de la Consejería de Educación.
El alumnado de segundo ciclo de Educación Infantil y Primaria podrá matricularse entre el 24 al 30 de junio, y en los institutos se abrirá el período de matrícula 12 días hábiles, a contar desde el 24 de junio.
A partir del 1 de julio, podrán presentarse las solicitudes excepcionales y el día 22 de julio se publicarán las vacantes. El 2 de septiembre será el sorteo del proceso de admisión extraordinario, y el 6 la adjudicación de vacantes para Educación Infantil, Primaria y Secundaria, mientras que para Bachillerato las solicitudes extraordinarias se presentarán los días 8 y 9 de septiembre, el sorteo se realizará el 12 y la adjudicación tendrá lugar al día siguiente.
