El Ayuntamiento de Salamanca anunció el pasado mes de noviembre la fase final de las obras de mejora de las instalaciones del campo de fútbol ‘Reina Sofía’, donde entrenan y disputan sus partidos los equipos del Real Salamanca Monterrey CF y Unionistas de Salamanca CF.
Los trabajos, que se llevarían a cabo durante nueve meses con una inversión superior a los 1,7 millones de euros, supondrán una contar con un campo más entrenamiento de fútbol 7, asientos individuales de plástico en todas las gradas, un videomarcador, drenaje perimetral, calefacción en vestuarios y un vestuario diferenciado por sexos para los árbitros.
Una de las mejoras anunciadas era la colocación de asientos de plástico individuales en todas las gradas cubiertas ya construidas, que han permitido incrementar el aforo hasta casi 5.000 espectadores.
Atornillados están bien atornillados, pero malos son un rato largo. No llevan dos meses y ya se empiezan a romper sin achacarle el deterioro a los usuarios, viendo por donde se están rajando. El deterioro puede ser debido a los balonazos, lo cual tampoco dice mucho de sus controles de calidad. Quién nos iba a decir que se iban a llevar balonazos en un campo de fútbol. Una mejora clara, sin duda, para el proveedor.
También se instalará un videomarcador y se mejorará la red de drenaje perimetral del campo, a mayores de la mejora de la iluminación del campo ya prevista con cuatro nuevas torres de focos LED que contarán con una intensidad suficiente y reglamentaria.