Desde la Federación de Sanidad de Comisiones Obreras en Salamanca, denuncian los problemas que, tras varios meses de funcionamiento del nuevo hospital de Salamanca, siguen sin solucionarse
A pesar de haber transcurrido ya un tiempo más que suficiente desde la puesta en marcha de un hospital que lleva años planificándose, las consultas siguen sin estar unificadas en un mismo edificio, lo que provoca un importante trastorno en el personal y las/os usuarios/pacientes.
A día de hoy la ubicación de las consultas está distribuida hoy entre los edificios del Nuevo hospital, Hospital Clínico y Virgen de la Vega, lo que provoca que en ocasiones las personas usuarias desconozcan dónde tienen que dirigirse. «Se dan incluso casos en los que deben realizarse pruebas en un edificio y después tener la consulta con el especialista en otro distinto», denuncian desde CCOO.
A esto se le suma la falta clara de señalización y/o planos de ubicación de servicios que provoca el continuo trasiego de personas por los pasillos que demandan información, lo que se agrava además porque existen escasos puntos de información para atender esta situación.
Desde CCOO aseguran que la situación del personal que trabaja en dicho complejo, «es de descontento, ya que el traslado de edificio y la unificación se ha desarrollado sin protocolos claros ni consensuados entre los y las profesionales de los servicios implicados, los y las representantes del personal y la dirección».
Además, las taquillas para trabajadores/as se encuentran alejadas de su puesto de trabajo y dispersas por diferentes edificios: Gestión, Clínico, Hospital Nuevo, Virgen de la Vega, lo que conlleva un aumento del tiempo empleado para el cambio de uniforme, que no se ve reflejado ni retribuido en su jornada laboral.
«En ocasiones, incluso, los profesionales tienen que soportar las inclemencias del tiempo al tener que desplazarse uniformados por la vía pública. Además existen categorías profesionales que ni si quiera tienen asignadas taquillas donde dejar su ropa de trabajo y pertenencias», apuntan.
Desde hace poco tiempo, se ha implementado el servicio de dispensación automática de uniformes, pero constantes las averías que presenta, «por lo que los y las profesionales no siempre disponen del cambio reglamentario de uniformidad. Se dan complicaciones con los tallajes y se producen aglomeraciones por el horario tan reducido de dispensación, que deben esperar para comenzar su turno», matizan.
Desde la FSS-CCOO Salamanca se han comunicado estas deficiencias en repetidas ocasiones a la dirección pidiendo que se solucionen a la mayor brevedad, sin embargo, no se ha obtenido respuesta ni solución.