Con el fin de reducir la mortalidad en las carreteras, la DGT ha establecido un nuevo dispositivo que tendrán que llevar los vehículos. La obligatoriedad comienza a partir del próximo 16 de julio y el dispositivo consistirá en una especie de ‘caja negra’.
Dentro del marco del nuevo protocolo que está desarrollando la Dirección General de Tráfico (DGT), se incluye la obligatoriedad de incorporar un nuevo dispositivo en los vehículos. Esta novedad deberán acatarla todos los automóviles para estar homologados y poder circular. Dicho dispositivo es muy similar a las cajas negras de los aviones, y los vehículos deberán incorporarlo a partir del próximo 16 de julio.
La función de este aparato consistirá en registrar los datos relevantes de los vehículos en caso de sufrir un accidente. La ubicación del mismo será bajo el asiento del conductor y grabará y borrará información constantemente. De esta manera, en caso de accidente, el dispositivo almacenará la información generada desde los 30 segundos previos hasta los 5 segundos posteriores. Con dicha información, se facilitará el posterior análisis de lo sucedido en el siniestro.
Según se ha podido conocer, estos dispositivos no grabarán sonido ni imágenes, por lo que su función consistirá en el tratamiento de datos anónimos. Por otra parte, un estudio del Parlamento Europeo ha indicado que estos sistemas podrán evitar hasta 25.000 muertes y más de 140.000 heridos graves en Europa durante los próximos 18 años. Estos datos refuerzan los planteamientos de la DGT, cuyo objetivo para el año 2050 es llegar a una mortalidad 0 en carretera.
Por otro lado, el organismo responsable del tráfico en España también ha planteado la incorporación de un nuevo elemento: el alcoholímetro antiarranque. Este sistema impediría el arranque de un vehículo si el conductor supera la tasa de alcohol permitida. No obstante, es solo un planteamiento, y la intención de la DGT es comenzar a probarlos en camiones y autobuses.
