[dropcap]Y[/dropcap]a tienen en Extremadura, en Plasencia, las Edades del Hombre: ‘Transitus’. Magnífica en su continente y en su contenido. Con un buen relato que abre a los visitantes a diversas etapas y mundos que pasan por la ciudad y la diócesis que nació ut placeat para agradar a Dios y a los hombres.
Acaba de ser inaugurada. Esperemos que se corrijan algunos defectos que la perjudican:
+ Cartelas de cada obra con letra muy pequeña y demasiado texto: no se ven con claridad. Olvidan los responsables que la mayor parte de visitas son personas mayores que tenemos muchas dificultades visuales.
+ No está bien señalado el punto de venta de las entradas, los visitantes van despistados de un lugar a otro preguntando.
+ El relato de los audiovisuales no se escucha bien, hay que esforzar mucho los oídos para captarlos.
+ Excesivo número de piezas artísticas que forman un espacio abirragado y difícil de contemplar-gustar.
+ Choca también que estando patrocinada la Muestra por la Junta, las Diócesis extremeñas y algunos otros benefactores tengamos que pagar la entrada de los 6 €. La catequesis siempre es gratuita y –dicen los señores obispos- que quieren que la exposición sea ante todo una catequesis.
+ Tampoco entiendo que solo puedan guiar y comentar las obras los guías oficiales (otra vez pagando antes…) y no puedan llevar las parroquias o asociaciones sus propios guías que suelen saber más de las obras y de sus gentes que los allí señalados.
+ No deja de ser otro fallo el que no se disponga de servicios en estas Exposiciones, la gente suele ir algo apretada y sale corriendo a los bares de alrededor. ¿No se podría haber previsto un lugar para estas necesidades tan humanas…?
Pero mi crítica, aún alabando el proyecto en conjunto, va mas allá:
+ La muestra se limita como en la mayoría de las anteriores en Castilla-León a volver a sacar del baúl de los recuerdos, obras y artistas sobre todo de muy pasados siglos. Maravillas escondidas en parroquias y monasterios que se exponen juntas y con las que se intenta transmitir un mensaje muy alejado de nuestro momento actual. Sólo hay un cuadro de la sagrada familia de un autor del siglo XX…¿Es que no tiene la iglesia extremeña obras de arte contemporáneo que estén en consonancia con nuestra sociedad y sus manifestaciones artísticas actuales…? Todo es pasado, artistas fenomenales en su tiempo…pero ¿transmitirán fe y emociones a los hombres y mujeres del siglo XXI…?
+ Las “Edades” se pensaron en aquellos primeros momentos como un proyecto evangelizador para la cultura actual. Poner el arte al servicio de la Buena Nueva –como siempre ha hecho la Iglesia en los diferentes siglos- en un clima de oración contemplativa, de anuncio del kerigma evangélico a una comunidad de fe y vida cristiana que peregrina por la vida, desde la belleza como atributo que acerca a la divinidad y al misterio. Me parece que este fin se ha perdido desde hace ya varias de estas Muestras: ahora prima lo cultural y lo económico, el desarrollo laborar y crematístico de las zonas donde se instalan, para satisfacción de sus alcaldes y políticos.
Se ha perdido aquél espíritu inicial de evangelización. La mayoría de los visitantes salen como entran. Lo que han visto –quizá por no entenderlo- no les cambia en nada. No les aumenta la fe ni la esperanza. ¡Y cómo van a entender y a creer si todo se ha convertido en un mercado y en un paseo turístico…!
Una pena. Otra ocasión perdida por la Iglesia para convertir y evangelizar.