El representante de COAG Zamora en las comarcas de Sanabria y La Carballeda, José Manuel Soto, denunció hoy, en declaraciones a la Agencia Ical, que dos aeronaves de la base de Rosinos de la Requejada “no estaban operativas” cuando se declaró el incendio en la Sierra de la Culebra “porque el dispositivo prescribe que no lo estén hasta el 1 de julio” y consideró que, “en caso de haber estado disponibles las avionetas, se podría haber atacado, muy poco después de producirse, la mitad de los focos” provocados por las tormentas secas que provocaron el siniestro.
“No me refiero a los aviones de carga mixta, sino a dos avionetas que cargan menos pero que pueden salir inmediatamente, tanto o más que un helicóptero. Si a eso añadimos que había carrocetas aparcadas por vacaciones, pues ya la tenemos liada”, comentó.
“Es muy triste que el fuego empiece a última hora de la tarde un miércoles y que pase la noche, pase el jueves y pase el viernes y tenga que llegar el sábado para que se movilice Roma con Santiago. Ahí ya había convoyes de Castilla-La Mancha, Galicia, Madrid… Hasta bomberos de Portugal. ¿Por qué no se hizo todo eso el jueves?”, preguntó.
José Manuel Soto consideró “normal” que la gente “esté muy cabreada”, en referencia a las críticas vertidas desde diversos sectores por la gestión del incendio y al episodio en el que vecinos de Villanueva de Valrojo increparon ayer a la comitiva de representantes públicos que había acudido a la zona. “Se enteran de que pasa por el pueblo y le montan el espectáculo. Es lógico. Se lo tomaron como una provocación. ¿Cómo puede tener el consejero la cara tan dura de salir en la televisión nacional diciendo que había suficientes medios e, incluso, de reserva? Se nos han quemado más de 30.000 hectáreas, lo que no está escrito”, cuestionó. “A ver si toman nota de una puñetera vez y saben cuidar lo que nos queda”, anotó.
Desalojo total
Por otra parte, el representante de COAG en Sanabria y La Carballeda aseguró que “no es buena idea” evacuar a la totalidad de los habitantes de un pueblo ante la proximidad del fuego y la concentración de humo tóxico. “Si no llega a quedarse gente escondida en los pueblos, se habrían quemado muchas casas. Hay que dejar gente activa que pueda cuidar de las casas”, recalcó.
En este contexto, Soto anunció que COAG pedirá “responsabilidades y dimisiones” por la “nefasta” gestión en el incendio de la Sierra de la Culebra. “Claro que faltaban medios para la extinción. ¿Qué nos están contando? Tiene que haber dimisiones, sí o sí. El incendio nos quema a nosotros pero a estos señores, nada de nada. No sufren ninguna consecuencia”, sentenció.
En cualquier caso, José Manuel Soto hico hincapié en que “lo prioritario, para COAG” es solucionar el abastecimiento a la ganadería, que ya vivía una temporada con escasez de pastos. “Se ha quemado todo y hay que alimentar el ganado. Estamos en contacto con el Servicio Territorial de Agricultura. Se están pidiendo datos a las unidades veterinarias de Alcañices, Tábara, Santibáñez de Vidriales y Puebla de Sanabria, así como a los propios ayuntamientos”, indicó.
Por otra parte, recordó que ha habido, al menos, unas 2.000 colmenas afectadas por el fuego. “Aunque muchas parezcan no haberse visto tocadas por las llamas, sí lo fueron por las altas temperaturas debidas al incendio forestal. Esa colmena ya no tiene vida, sin contar con que todo el entorno está quemado”, expuso.
“Lo más importante ahora es la alimentación del ganado y, después, veremos qué nos vienen prometiendo. Estamos hablando de plantaciones enteras de pino, castaño, roble y muchas fincas particulares afectadas. Unas pérdidas que no creo que seamos capaces de que se resarzan. Los que estamos aquí no volveremos a ver lo que teníamos hace una semana”, lamentó.