Los agentes de la Policía Local de Salamanca tuvieron varias intervenciones en distintas calles de la ciudad al recibir llamadas denunciando el exceso de ruido que se estaba produciendo de madrugada
La primera de las llamadas por exceso de ruido llegó desde una vivienda de la calle Volta, al acudir los agentes se acabó la fiesta sin necesidad de medir.
No ocurrió lo mismo en la calle Magallanes, allí los agentes midieron la intensidad de ruido a las 3.46 horas de este domingo con resultado positivo.
Y por último, a las 4.20 horas, en la calle Miñagustín una persona probó el acelerador de su vehículo despertando a los vecinos. Cuando los agentes acudieron, el coche había ‘volado’.