Los medidores de CO2, que se adquirieron por parte de la Junta el curso pasado con motivo de la pandemia del COVID para adecuar mejor la ventilación de cada aula en cada momento al asegurar siempre una óptima calidad del aire, continuarán en las aulas para la eficiencia energética y el confort de los alumnos.
Ical.- Así lo aseguró este jueves la consejera de Educación en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno. La Junta compró el año pasado 16.239 dispositivos con un desembolso de 1,4 millones de euros. Tras las vacaciones escolares de Navidad, el Comité de Expertos de Castilla y León recomendó a la Junta dotar a las aulas de la Comunidad de medidores de CO2.
Para el próximo curso, reiteró que el protocolo COVID fue provocado por la pandemia y, por lo tanto, el nuevo curso escolar no contará con uno. “Las autoridades sanitarias no nos han transmitido ninguna situación de pandemia”, afirmó, por lo que aseguró que el nuevo curso será “ordinario”. Unos protocolos que durante los cursos COVID han marcado los requisitos de las aulas, la distancia de separación entre los alumnos y el uso de la mascarilla en las clases.
En este sentido, apuntó que la Consejería no ha recibido ninguna indicación sobre la necesidad de mantener las ventanas abiertas para la ventilación de las aulas.