La celebración en Salamanca de la Feria Internacional de Emprendimiento del proyecto CYL-HUB ha supuesto una gran oportunidad de darse a conocer para las empresas. Una de las que han participado en estas jornadas es ZIES Investigación y Consultoría, con una clara apuesta por la dinamización del mundo rural. Natalia Arcajo, mánager de investigación de ZIES ha explicado a este diario las líneas de actuación de la empresa, así como varios aspectos relacionados con el sector.
¿En qué consiste vuestra empresa?
Somos una empresa especializada en la investigación social, concretamente en las técnicas cualitativas, y trabajamos en diferentes sectores. Realizamos proyectos para entidades públicas, investigadores de la universidad y en el área rural. En este último tenemos una gran experiencia y sobre todo realizamos diagnósticos territoriales, estudios socioeconómicos, procesos de participación ciudadana y desarrollo local. Si bien es cierto, nos adaptamos mucho a las necesidades de cada cliente.
¿Qué os diferencia de vuestros competidores?
Nos gusta decir que somos artesanos, y esto quiere decir que cada cliente con el que trabajamos tiene una respuesta única. Al ser una empresa pequeña, tenemos una interacción muy cercana con el cliente y adaptamos todos nuestros conocimientos y experiencia a sus necesidades. Por tanto, contamos con que no hay una fórmula única, sino que generamos la fórmula o el producto adecuado a cada necesidad.
¿Con qué tipo de clientes trabajáis?
Con empresas, administraciones públicas y grupos de acción local.
¿El mundo rural ofrece más posibilidades de lo que se puede creer?
Sin duda. Creo que ya las está ofreciendo y que la coyuntura actual nos ofrece esta perspectiva. Tenemos una crisis energética, el encarecimiento de los combustibles fósiles, la necesidad de una transición energética, un cambio en los modelos de consumo, el cambio climático, etc. Estamos viendo un cambio en la conciencia de los consumidores, en relación al consumo de proximidad, de km0, ecológico… y todo esto nos ofrece un abanico de posibilidades y oportunidades de desarrollo que sin duda las zonas rurales pueden utilizar en su beneficio.
¿Qué podría hacerse pare revitalizar la España rural?
Debemos partir de la base de que no hay una fórmula universal y menos que yo, desde mi oficina de Salamanca, puedo decidir sobre el futuro de cualquier pueblo. Las acciones e iniciativas tienen que partir del propio territorio y de las personas que allí viven. Nosotros somos una herramienta y realizamos el diagnóstico territorial, vemos qué oportunidades tienen, qué desafíos, qué prospección demográfica pueden tener, etc. Una vez que se hace el diagnóstico socioeconómico del territorio, se trazan unas líneas a través de las cuales estas personas pueden trabajar y realizar proyectos para dinamizar el territorio. No obstante, cada territorio es único y tiene unas condiciones sociales, económicas, territoriales, de medios y recursos únicas. También tenemos que pensar que los ritmos del mundo rural son muy diferentes a los de la ciudad. Ya hay iniciativas y personas que están llevando a cabo proyectos que tienen un pequeño impacto a nuestros ojos, pero significativo en el territorio. Entonces, con esta perspectiva y con el hecho de que sea el propio territorio el que decida sobre su futuro.
¿Cuál crees que debe ser el papel de la mujer en el mundo rural?
El papel de la mujer en la España rural siempre ha sido fundamental, aunque no se ha visibilizado lo que ha estado haciendo. Ahora estamos viendo cómo las zonas rurales están fuertemente masculinizadas. Sin embargo, creemos que el papel de las mujeres va a ser fundamental, como el del resto de personas que decidan emprender allí. No se puede generalizar en función del género. Las mujeres son la mitad de la población, por tanto, van a tener que estar. Además, podemos comprobar cómo están surgiendo en diferentes zonas redes, por ejemplo, de mujeres ganaderas o de otros proyectos realizados por ellas.
¿La agricultura ecológica es rentable?
Nosotros consideramos que sí, es rentable y es necesaria. Es importante pensar que no se trata sólo de si es rentable o no, sino de si es necesario. Estamos viendo que la ganadería y la agricultura intensivas tienen efectos perjudiciales, tanto para los recursos como para el territorio y el producto final. Por lo que, en ese sentido, aunque pueda ser rentable seria mejor optar por opciones extensivas.
¿Qué otros sectores se podrían impulsar en estas zonas?
El sector primario es desde luego fundamental, y más con el abandono que estamos viendo de los campos en España. Y es que al final, en nuestro país importamos mucha materia prima que podríamos producir aquí. Por otro lado, el turismo es otro punto fuerte, pero consideramos que no debe ser el único y fundamental. Además, en función de las posibilidades y el contexto de cada territorio se presentan múltiples opciones, por ejemplo, zonas con terrenos fértiles o con buena posición geográfica.
¿El teletrabajo puede suponer una oportunidad importante?
Desde luego. Además, estamos viendo el auge de los coworkings rurales y mucha predisposición al teletrabajo. También la crisis del COVID ha acentuado esa preferencia por la calidad de vida en algunas personas. Yo creo que esto va a ir en aumento y ahora que se va visto que es posible teletrabajar puede ser un buen punto para fomentar el crecimiento.
¿Cuáles eran vuestras expectativas en Startup Olé?
Principalmente compartir nuestra experiencia, lo que conocemos y generar sinergias en lo que se pueda. Sobre todo, como tenemos mucha experiencia territorial en Castilla y León, transmitir esa experiencia y nutrirnos de todas las personas que hay y que tienen proyectos muy interesantes.
¿Formáis parte del proyecto CYL-HUB?
Actualmente no, pero sí que nos parece muy interesante y con vistas al futuro nos lo vamos a plantear.
¿En qué podría beneficiaros?
La red siempre beneficia a todos los miembros que forman parte de ella, por tanto, creemos que puede ser beneficioso en cuanto al conocimiento y la calidad de los proyectos realizados. Además, podría facilitarnos llevar a cabo nuevos proyectos en conjunto con otras empresas que puedan aportar otra visión. También, todo lo que ayude a que nuestro territorio sea un sitio donde quedarse y poder hacer un buen trabajo.
El proyecto CYL-HUB
CYL-HUB consiste en un proyecto cuyo objetivo consiste en impulsar la innovación y el emprendimiento en Castilla y León. Está basado en cinco ejes principales: la creación de empleo, la transición ecológica, la cohesión social y territorial, la digitalización y la igualdad de género. En este último aspecto, centra sus acciones en la promoción y el apoyo a las mujeres emprendedoras e inversoras. Para todo ello, cuenta con un presupuesto total de más de 1,3 millones de euros, procedentes de los fondos Next Generation de la Unión Europea y canalizados a través de la Junta de Castilla y León.