Ante lo que consideran una vulneración de los intereses de la Región Leonesa tras el importante desembalse de agua hacia Portugal desde Salamanca, Zamora y León ejecutado por el Gobierno, desde Unión del Pueblo Leonés (UPL) se ha registrado una batería de preguntas en el Senado, a través del senador Carles Mulet, mediante las cuales los leonesistas piden explicaciones al ejecutivo central por dicho desembalse.
En este aspecto, UPL cree que el Gobierno podría haber vulnerado el Protocolo Adicional del Convenio de Albufeira, que apunta en su artículo 1.1 que la determinación del régimen de caudales se basará en criterios como las características hidrológicas o climáticas de cada cuenca hidrográfica, las necesidades de agua para garantizar el buen estado de las aguas de acuerdo con sus características ecológicas, o las necesidades de agua para garantizar los usos actuales adecuados a un aprovechamiento sostenible de los recursos hídricos de cada cuenca.
Por ello, los leonesistas creen que el Gobierno central podría haber incumplido dicho Convenio y los intereses de la Región Leonesa al hacer caso omiso a las peticiones hechas desde León, Salamanca y Zamora de no realizar el desembalse hacia Portugal en las cantidades que planteaba el Gobierno, atendiendo a la situación crítica de los embalses leoneses de cara a asegurar el riego y el abastecimiento de agua potable.
A juicio de UPL estas peticiones se amoldarían a las Disposiciones finales del Protocolo Adicional del Convenio de Albufeira, en las que se habla como “usos prioritarios”, el “abastecimiento de poblaciones y usos de carácter social, en particular, el mantenimiento de los cultivos leñosos, y las condiciones ambientales en el río”. De este modo, consideran que España podría haberse acogido al artículo 3 del Protocolo Adicional del Convenio, en el que se habla de “periodos de excepción” relacionados precisamente con la escasez de precipitaciones para no satisfacer los caudales ordinarios establecidos en Albufeira en la Cuenca del Duero.
Pese a ello, denuncian que el Gobierno ordenó un desembalse que ha reducido el nivel de agua en Riaño al 31%, en Santa Teresa al 40%, en Porma al 30%, en Irueña al 36% y en Ricobayo al 18%, considerando “especialmente doloroso” el caso de la presa de Almendra, la que más agua ha aportado en dicho desembalse (200 hectómetros cúbicos en apenas 12 días), reduciendo su nivel de agua a apenas el 25%. Un hecho que desde UPL apuntan que “pone en peligro el abastecimiento de agua potable de más de un centenar de municipios de Salamanca y Zamora, registrándose en este embalse cientos de peces muertos por falta de oxígeno”.